Planear viajes es siempre una tarea
Comprar un pasaje, hacer una valija, organizar un itinerario de viaje son tareas que con el tiempo voy sistematizando, y cada vez hago mejor. Para comprar pasajes internacionales uso agencias de viaje, ya que para hacer cambios de fechas, los sitios de internet no funcionan muy bien. Cuando mis fechas son inamovibles o son vuelos domésticos, alterno entre varios sitios de internet para comprar los pasajes, o uso Hopper, una aplicación que predice el mejor momento para hacer la compra, cuando los pasajes son más baratos.
Para organizar el itinerario, leo blogs y libros de autores locales, veo películas filmadas en el destino, estudio guías de turismo y anoto todo lo que me llama la atención. Buscar datos en revistas viejas me encanta, ya que muchas veces me hace entender mejor la ciudad y sus cambios en las últimas décadas. Mi colección de revistas National Geographic de los 50 a 80 son las mejores para esto. Cuando me cruzo amigos con quienes comparto el amor por la comida, el arte o la moda les pido datos, datos y más datos. Muchas veces los turistas o expatriados tienen mejor información que los locales, ya que ven a la ciudad desde un lugar diferente. Me gusta ver películas y series inspiradas o filmadas en el destino, que veo las semanas antes de viajar o en el avión, para ir sumergiéndome en su cultura antes de llegar.
Por las noches me paso horas armando mi mood-board en Pinterest con imágenes de Tokio y sus transeúntes, planeando mi valija acorde, en este caso, looks Kawaii y Lolita Gótica. Cuando encuentro algún personaje interesante en Instagram, le escribo preguntando si me quiere llevar a recorrer las calles de su fascinante ciudad, y mostrarme los mejores lugares para comprar atuendos como los suyos. Uno de cada diez me contesta.
Una vez recopilada la información, armo una planilla organizada por rubro y fuente, comparo notas y selecciono lo que creo que más me va a gustar. Agrego todo a un mapa de Google, armo mis recorridos por barrio y ¡sayonara!