Ossobuco con hongos secos
Para 4 personas
4 ruedas de ossobuco grandes
1 cebolla
1 pimiento colorado
1 zanahoria
2 tomates redondos
1 taza de puré de tomate
100 g de hongos secos
2 tazas de vino tinto
Guarnición
250 g de polenta
500 cc de caldo de verduras
150 g de queso rallado
1 cucharada de manteca
100 g de queso en láminas
Sal y pimienta negra molida
1. Dore el ossobuco con 4 cucharadas de aceite. Incorpore la cebolla, el pimiento y la zanahoria cortados en cubos. Saltee hasta dorar levemente. Incorpore el vino y el puré. Cocine a fuego bajo hasta tiernizar (1 1/2 hora). Pique los tomates, sin piel ni semillas, y los hongos previamente hidratados con agua caliente. Añádalos y salpimiente.
2. Guarnición: hierva el caldo, agregue la polenta en forma de lluvia y revuelva hasta que tome cuerpo. Condimente con el queso rallado y salpimiente. Extiéndala en una placa enmantecada de 2 cm de espesor. Lleve a la heladera. Una vez fría, córtela en porciones.
3. Cubra con láminas de queso y gratine en horno fuerte. Sirva junto con el ossobuco.
Secretito: la polenta es la harina hecha con los granos de maíz. Es mejor si compra la que no es precocida o instantánea, ya que contiene más nutrientes y es muy sabrosa. Eso sí, hay que cocinarla 1/2 hora, como mínimo, revolviendo constantemente.