El ex defensor brasileño, que ganó dos mundiales con la selección de su país, siempre estuvo detrás de la problemática y hoy busca reforzar su postura
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“El racismo no es un tema reciente. Desde mi época como jugador fui testigo de los actos racistas que se presentan en muchos campos de fútbol. Palabras como negro, simio, macaco eran muy frecuentes para dirigirse despectivamente a los futbolistas. Esta lucha contra el racismo ya existía, y no es muy distinta a la que se vive hoy, con la diferencia de que ahora las redes sociales se han convertido en un amplificador tanto para lo malo como para lo bueno, también como herramienta para combatirlo”.
El ex jugador brasileño Cafú es uno de los pocos que han logrado más de un título mundial con su selección. El lateral por derecha alzó la copa en EE.UU. en 1994 y como capitán en Corea y Japón 2002. Además, ganó la Copa Libertadores e Intercontinental con el San Pablo y la Champions y El Mundial de Clubes con el Milan, entre tantos títulos obtenidos en sus casi 20 años de carrera.
Siempre será recordado como un extraordinario defensor que, como en los viejos tiempos, pasaba al ataque con determinación. Algo que ya no está ocurriendo con los laterales que juegan en la selección brasileña.
“El racismo no puede ser juez de nuestras vidas”
Sin embargo, más allá de todos sus logros deportivos desde hace varios años Cafú viene dando otra pelea: la de luchar activamente contra el racismo en el fútbol y en la sociedad, en general.
“Personalmente yo no viví una experiencia de racismo, pero a lo largo de mi carrera deportiva, en los torneos más pequeños, hasta en las grandes competiciones del fútbol, fui testigo de los tratos racistas hacia muchos jugadores y sigo siendo testigo de lo que se está viviendo en los campos de futbol, pero también fuera de ellos. El racismo no puede ser juez de nuestras vidas”, expresa Cafú a LA NACION.
Hace unos meses en España se produjo un hecho discriminatorio que podría ser la punta del iceberg para terminar con este flagelo que tanto daño hace. En el partido entre el Valencia y el Real Madrid en Mestalla, los hinchas locales, que estaban detrás de uno de los arcos, hicieron gestos de mono y sonidos hacia Vinicius, figura brasileña del Madrid, quien enseguida le advirtió al árbitro y apuntó hacia ellos en la tribuna. El delantero terminó llorando cuando se sumaron más abucheos en su contra desde las cuatro tribunas del estadio.
El incidente desató una oleada de apoyo para el delantero brasileño, que es de raza negra, y que llevó a que pidieran a las autoridades españolas y a la sociedad a tomar más acciones. Fue interpretado por muchos como un momento importante en la lucha contra el racismo en el fútbol español.
Mucho más aun cuando se dictó la sentencia sobre esos episodios y tres hinchas del Valencia fueron condenados a ocho meses de prisión tras declararse culpables por proferir insultos racistas contra Vinicius Junior, en la primera sentencia condenatoria por un caso de racismo en el fútbol profesional de España.
¿Pudiste conversar al respecto con Vinicios Junior?
Cuando sucedió no tuve la oportunidad de hablar con él, pero mi consejo para él y para otras personas que lo viven es que sigan levantando su voz desde el respeto y busquen generar conciencia para que este problema termine de una vez por todas.
Imagino que te habrá puesto feliz esta sentencia...
Sí, claro. Y este tipo de condenas no solamente ocurrieron en España, sino que también en diferentes ligas en el mundo. El primer paso para resolver un problema es reconocer que ese problema existe. El fútbol va por buen camino para combatir el racismo.
Cafú, un Embajador para combatir el racismo
A raíz del compromiso por estos temas que lo caracterizan al ex jugador, que actualmente tiene 54 años, fue nombrado como embajador de Makakooo, la marca mundial que nace con el propósito de luchar contra el racismo.
Con ropa casual y accesorios de la más alta calidad, Makakooo aportará a la lucha contra el racismo donando el 15% de sus ganancias, a través de las ventas que logre la marca con los buzos de capucha y las camisetas a a la Fundación Tiempo de Juego Colombia, Action for Compassion Ghana y Ecoar das Vozes Arte e Cultura de Brasil, tres ONGs que activamente combaten el racismo desde sus iniciativas.
A largo plazo se espera que la marca se convierta en un referente global en la lucha contra el racismo y, así, generar un cambio real en nuestra cultura y en las políticas de los gobiernos para castigar tales actos. Uno de los objetivos es poder llegar a una ONG en la Argentina que comparta los mismos valores.
“Creo que es mi tarea y mi deber alzar la voz, porque mi color y mi origen solo deben ser motivo de orgullo. Hablo en nombre de millones de personas que, por ser víctimas del racismo, hoy no pueden hacerlo. Basta ya a este racismo que se vive no sólo en el fútbol, sino en innumerables espacios y deportes. Esto tiene que parar”, insiste.
¿Supiste de algún compañero o colega que en tu época fue víctima del racismo?
Conozco muchas historias, pero no puedo hablar con nombre propio porque son situaciones muy íntimas. Cada una de esas situaciones son las que hoy me traen aquí como embajador de esta marca, para alzar la voz en nombre de los futbolistas, pero también de todas las personas que lo viven día a día fuera de los terrenos de juego.
¿Por qué creés que en la actualidad se producen más episodios de racismo?
No podría asegurar con certeza que hay más o menos, pero claramente las redes sociales se han convertido en un amplificador de las situaciones y definitivamente hay mucha más conciencia de la problemática.
Las redes sociales dan mayor visibilidad de las situaciones que se viven, y así como son un canal para nosotros para enviar un mensaje positivo, desafortunadamente son usadas de manera equivocada por personas.
¿Qué podemos hacer (cada uno desde su lugar) para terminar con estos actos discriminatorios?
El primer paso para resolver un problema es reconocer que ese problema existe. El fútbol va por buen camino para combatir el racismo. Diferentes ligas en el mundo ya empezaron, como en España donde un tribunal de Valencia condenó a tres hombres que hicieron comentarios y gestos racistas contra Vinicius Junior (jugador del Real Madrid).
La lucha contra el racismo es un problema de todos y cada uno puede aportar de diferentes maneras a partir de un ejercicio de reflexión.
¿Por qué creés que estando en el Siglo XXI tenemos que seguir soportando cualquier tipo de discriminación racial?
Porque sigue existiendo un problema de educación. Para mí, lo más importante es educar. Es necesario, por ejemplo, sembrar valores como la igualdad, el respeto y la empatía en los niños, que finalmente son el futuro de la sociedad.
¿De qué manera pensás que esta marca puede ayudar a eliminar el racismo en el fútbol y en el deporte en general?
Porque ya nace con un propósito activo. Hoy las marcas deben ser conscientes que tienen un rol más allá de la venta. Eso fue lo que me hizo sumarme a este proyecto.
Yo creo que estamos preparados para hacer historia, tenemos todas las herramientas para hacer una verdadera declaración antirracista. Cada venta de nuestros productos representará una ayuda económica a fundaciones, donde esperamos ir teniendo un impacto real medible.
La moda es una industria que está en constante crecimiento, convirtiéndose en un símbolo muy poderoso para mostrar nuestras costumbres, gustos y personalidad de formas creativas. Debajo de la ropa y de la piel todos somos iguales.
El racismo es uno de los problemas más complejos que ha enfrentado la humanidad desde hace muchos años y solo nosotros mismos, unidos, podemos cambiar la situación porque al final todos pertenecemos a la misma raza y es la raza humana. Todos somos iguales, todos contra el racismo.
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