Fue la voz del estadio y dice que su humor puede depender de un resultado. Un ping pong con una fanática que se hizo de San Lorenzo para desempatar en su familia.
Te criaste con tres hermanos: dos de Racing y uno de San Lorenzo. ¿Cómo decidiste de qué cuadro ser?
Sí, es una familia dividida y fue para empatar. Mi papá y dos de mis hermanos son de Racing; mi mamá, mi hermano Ignacio y yo, cuervos. Mi tío me regaló un chanchito alcancía con los colores de San Lorenzo y con Nacho me fueron convenciendo.
¿Te llevaban a la cancha?
De chica no fui mucho porque mi viejo era de Racing y, además, las mujeres no iban tanto. Empecé a ir a los veintipico cuando mi actual marido, que es de River, me empezó a llevar. Fue como un cortejo; él sabía que a mí me divertía, así que remó un año entero y justo salimos campeones, en el 95. Después no me acompañó nunca más y cada uno fue por su lado. De ir a la cancha me gusta la situación de participar de algo colectivo, estar unidos por una misma pasión.
¿Qué lugar les das al fútbol y a San Lorenzo?
Me maneja un poco el humor; tengo épocas en las cuales le doy más o menos bola, pero me importa un montón cómo le va al club. Me siento muy contenta con lo que el club representa, me cae muy bien el hincha de San Lorenzo. Es una cancha muy variada con muchas mujeres y familia, una hinchada que no es soberbia, que tiene paciencia, alegría creatividad. Y es un club con épica. Tengo simpatía con Racing por eso mismo; además de un tema familiar, compartimos lo épico. Para los clubes más poderosos es todo más fácil. Pero no solo juegan los éxitos deportivos; nosotros nos fuimos al descenso, está el tema de la cancha, la pertenencia al barrio. Me gusta el trabajo que hacen con la villa de una pertenencia territorial.
¿Ves bien la vuelta al Boedo?
Soy periodista y no puedo ignorar que hay una controversia con el tema. Entiendo la preocupación, pero es épico el volver, que entre todos compramos metros, es sentir que hay algo colectivo. Me encanta la idea de hacer un estadio moderno con una buena relación con los vecinos.
¿Si fueras periodista deportiva dirías que sos cuerva?
Así como los periodistas políticos en general no decimos a quién votamos, creo que si alguien dice que es de River o de Boca tendría problemas. ¿Si digo que soy de San Lorenzo sería creíble cuando hable de Huracán? Con equipos más chicos, el problema es más con el rival directo.
¿Cómo fue el día que hiciste la voz del estadio?
Fue muy gracioso porque el presidente Matías Lammens a veces escucha mi programa de radio y veníamos bromeando con mi equipo sobre el tema. Entonces me invitó, pero se transformó en algo dramático porque perdimos 4 a 0 contra Godoy Cruz ese día. Yo di la formación y algunos avisos de seguridad. Me encantó, pero por las dudas no sé si hacerlo de nuevo, aunque quiero sacarme las ganas y que termine con un triunfo.
COMPLETÁ LA FRASE
El mejor periodista deportivo es: Ezequiel Fernández Moores, porque es muy completo y cuenta historias que trascienden el fútbol
Que el Papa sea cuervo: me parece genial, le da más épica al club
El clásico de San Lorenzo es: fue Huracán, después casi fue Vélez (risas), pero sigue siendo Huracán
Ilustración apertura: Gonza Rodríguez
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