Los fenómenos de grupo: cuáles son las cuatro actitudes que pueden lastimar a los demás
Los humanos somos seres gregarios y tenemos la necesidad de participar de distintos grupos; pero es a unión puede convertirnos en mejores personas o todo lo contrario
- 3 minutos de lectura'
PARA LA NACIONBernardo Stamateas
Cada vez que se arma un grupo, por lo general, se pierde la individualidad de cada uno de sus miembros. Puede ocurrir que surja un “yo grupal” y dicho grupo pase a tener un objetivo positivo o negativo. La pérdida de la individualidad y el surgimiento del yo grupal hace que ese grupo se sienta invencible.
Esta es la razón por la que un grupo de personas sea capaz de cometer las peores atrocidades o de realizar las mejores hazañas. Los humanos somos seres gregarios y tenemos la necesidad de participar de distintos grupos, tales como la familia, los compañeros de la escuela o el trabajo, los amigos del barrio, etc.
Ahora bien, existen ciertos “fenómenos”, o actitudes, que tienen lugar dentro de un grupo y pueden llegar a causarles daño a los demás. Los siguientes son algunos de ellos:
1. El complot
Este fenómeno se da cuando varias personas se unen para destruir a otra. ¿Por qué no la enfrentan de manera individual? Porque, en el fondo, sienten temor y no se atreven a actuar por cuenta propia. De modo que necesitan de una unión fuerte con otros, con el único objetivo de desprestigiar, herir o destruir a un tercero.
2. La triangulación
Este es un fenómeno muy común en las parejas separadas y se trata de “uno entre dos”. La mamá o el papá le preguntan al hijo: “¿A quién querés más vos: a mamá o a papá?”. O: “¿Qué hizo tu papá/tu mamá el fin de semana?”. En este caso, A tiene un problema con B; pero, en lugar de ir a hablarlo directamente con B, se lo cuenta a C (que sería el triangulado) para que vaya a hablar con B y arregle las cosas entre ellos. Como adultos, nunca deberíamos aceptar quedar en el medio de un conflicto que no nos pertenece.
3. La coalición
Aquí tenemos a dos personas que se unen para destruir a otra. Desde el punto de vista psicológico, suelen ser dos que no se quieren, que no tienen puntos en común, pero se necesitan mutualmente, ya que los une un mismo objetivo: la destrucción de un tercero.
4. El chivo expiatorio
Este es un fenómeno grupal donde todos depositan su propio malestar y deseo de división en alguien. Como resultado, lo señalan como el que está mal y tiene la culpa de todo. Es decir, como el “chivo expiatorio” que mantiene al grupo unido. En realidad, es el portador de todas las frustraciones y emociones negativas del grupo. De esta forma, sus miembros proyectan y descargan en alguien aquello que no pueden, o no quieren, ver en sí mismos.
A lo largo de la vida, todos nosotros necesitamos construir alianzas, lo cual consiste en unirnos con otro u otros en pos de un objetivo común. Cuando nos unimos para el bien, para crecer, para construir, para obtener logros juntos, desaparece la necesidad de lastimar a los demás y nos convertimos en mejores personas.
Conforme a los criterios de
Más leídas de Lifestyle
Alimentación. Las 11 reglas para vivir más años, según la familia más longeva del mundo
Para considerar. El alimento que un cardiólogo recomendó no incluir jamás en el desayuno
Secreto de jardín. El fertilizante ideal para hacer crecer las plantas en tiempo récord: se prepara en casa y es barato
¿Es así? Qué personalidad tienen las personas que se bañan por la mañana
