La visión de un jugador en ascenso
Se sabe: cada agosto, la industria de la moda vibra con su augurio de verano. Y este agitado mes que acaba de irse, por cierto, no fue la excepción.
Hace unas semanas charlamos en estas mismas páginas sobre cómo, además, la industria de la indumentaria entretiene. Y hoy, me detengo en un jugador en ascenso. Se llama Guillermo Azar. No lo conozco -aún- personalmente, ya que hasta ahora fue para mí tan sólo una voz en el teléfono. Pero eso sí, de esas que traspasan el cableado y dejan huella. Me pareció lo que comúnmente se dice "muy buena onda".
Lo contacté porque sentí la curiosidad de hacerle algunas preguntas relacionadas con su ciclo Designers Look BA, que inauguró hace dos viernes la temporada de verano, en el Tattersall de Palermo. El disparador de mi intriga fue su grilla, que me pareció simplemente impresionante.
Aclaremos que el ciclo acaba de finalizar su sexta edición. Pero si de algo le valieron las cinco anteriores, fue para tener hoy un peso en la escena del fashion local que no debería pasar inadvertido para nadie.
He aquí un repaso por las marcas y diseñadores que allí se presentaron, a los pies de la imponente Avenida del Libertador: JT by Jessica Trosman, Pablo Ramírez, Evangelina Bomparola, Zitto, Garza Lobos, Mariana Dappiano, Laurencio Adot, Vevu, Min Agostini, Bandoleiro y un desfile de diseños sustentables, entre otros. Nada más y nada menos.
"Armamos una grilla que contempló tanto a los diseñadores de trayectoria, como a los nuevos talentos y a la moda solidaria", explicó luego Azar. Y resaltó: "Es el marco perfecto para los que entendemos que un ciclo puede hablar distintos lenguajes conservando una coherencia común. Por esa razón les abrimos la puerta tanto a propuestas exquisitas, como a otras disruptivas y a la sustentabilidad".
El espacio en el cual sucedieron todos los desfiles era sencillo, pero quizás por eso, también, irreprochable: se trató de un gran salón con una pasarela muy ancha al ras del piso. No hubo mayores atracciones ni distracciones. Su página web tampoco pecaba de ostentosa. El público de cada show, en cambio, se notaba entrenado, cautivo. Todo lo cual logró teñir a Designers Look BA de una encantadora autenticidad.
En conclusión, creo que es una excelente noticia que Guillermo Azar y su creación se posicionen como jugadores cada vez más importantes dentro del mapa de las semanas de moda en Buenos Aires, una ciudad en la que, históricamente, se destacan BAFWeek y BAAM.
"Empecé con una marca de ropa, en el auge de las jeaneras como ViaVai y Paula Cahen D'Anvers. Era fabricante y ése fue mi primer acercamiento a la industria. En 2001 decidí volcarme a la producción integral de desfiles y al tiempo empecé a trabajar a lo largo y ancho del país", contó cuando lo obligué a definirse. Y con respecto a expresarse en relación con el futuro, no vaciló: "Lo que más queremos -sí, en todas sus respuestas hizo deliberado uso del plural- es que Designers Look BA sea la mejor semana de la moda en la Argentina. Y una vez que logremos eso, nuestra próxima meta será llevar el proyecto al exterior".