La última hamburguesa de McDonald’s en Islandia se conserva intacta 13 años después del cierre de la cadena
Un hombre oriundo del lugar compró un combo en 2009 para probar la velocidad de descomposición de los productos y se llevó una gran sorpresa; dos australianos también hicieron el experimento en 1995
- 3 minutos de lectura'
Hace más de una década, y en medio de un contexto de crisis económica mundial, el último McDonald’s que había en Islandia cerró sus puertas para siempre. Sin embargo, un hombre que escuchó el rumor de que los alimentos de esa cadena de comida rápida nunca se descomponía, se apresuró a comprar una hamburguesa con papas sin imaginarse que 13 años después, comprobaría que su pedido permanecía intacto en el tiempo.
Hjortur Smarason fue la persona quien el 30 de octubre de 2009 se atrevió a probar aquella hipótesis. De acuerdo con su relato, encontró la hamburguesa tres años después en la baulera de su casa durante un proceso de mudanza. El refrigerio estaba en una bolsa entre unos patines en línea y otras cosas viejas. “Parecía que la había comprado hacía 15 minutos”, manifestó según reseñó la BBC.
Asimismo, Smarason pensó que el combo ya formaba parte de la historia nacional, por lo que consideró que debía estar mejor resguardado y al alcance de todos y lo donó al Museo Nacional de Islandia. Pero allí surgió un problema ya que un especialista de la institución consideró que no estaban correctamente equipados como para conservar alimentos y se la devolvieron a su propietario.
Luego de pasar por varios lugares, finalmente encontró un hogar permanente en el Hostal Snotra, al sur de Islandia. El dueño de la posada, Siggi Sigurdur, contó a la BBC que luego de más de una década la hamburguesa “se veía bastante bien”. A su vez, acotó: “Es algo divertido, por supuesto, pero te hacé pensar en lo que estás comiendo. No hay moho, es solo el envoltorio de papel que parece viejo”.
El parador -que se volvió muy famoso- actualmente recibe visitantes de todo el mundo que van a tomar fotos del combo así como a hacerse selfies. El Hostal Snotra también tiene su propio sitio web donde los más curiosos pueden ver la transmisión en vivo del lugar donde reposa la hamburguesa y ya llegó a recibir hasta 400 mil visitas diarias.
El caso islandés no es el único hasta ahora en la historia. Casey Dean y Eduard Nits son dos australianos que compraron en 1995 una bolsa de McDonald’s “cuando todavía la cadena de comida era una novedad para los adolescentes”, según reportó el Daily Star.
El festín fue mucho para ellos y una hamburguesa con queso que les sobró, terminó en una caja en la baulera de la hermana de Nits. No fue sino hasta 2015 que redescubrieron el objeto. El hombre contó que había mordidas de rata en la bolsa, pero que la comida permanecía intacta.
Por su parte, McDonalds se pronunció en diversas oportunidades frente a casos como estos donde la gente cuestionó de qué está hecha la comida de la cadena rápida y explicaron que “en el ambiente adecuado, las hamburguesas, así como la mayoría de los alimentos podrían descomponerse”, pero que sin humedad, era poco probable que se produjera moho, bacterias o que se descompusiera y solamente “se secara”.
Otras noticias de Trends
La danza de los siete platos voladores. El avistaje de OVNIs en Miramar que estremeció a la Argentina en 1975
Sorprendente. Tiene 101 años y cada vez que vuela una aerolínea la confunde con un bebé
Actorazo. Brilló en la TV, se instaló en la Argentina y su trágico final en Recoleta hizo llorar a muchos
Más leídas de Lifestyle
Alimentación. Las 11 reglas para vivir más años, según la familia más longeva del mundo
Secreto de jardín. El fertilizante ideal para hacer crecer las plantas en tiempo récord: se prepara en casa y es barato
Para considerar. El alimento que un cardiólogo recomendó no incluir jamás en el desayuno
“Nunca dejó de ser un nazi”. La historia desconocida detrás de la detención de Erich Priebke: un pintor belga y una confesión inesperada