La simple manera que encontró Australia para terminar con la contaminación de los ríos
En la Argentina, si se piensa en la contaminación de los ríos, lo primero que viene a la cabeza es el Riachuelo: aguas repletas de basura, y decenas de proyectos de saneamiento que no evitaron que se siga arrojando residuos. Mientras tanto, del otro lado del mundo, en Australia, las autoridades encontraron una manera fácil y eficaz de solucionar en problema.
En la ciudad de Kwinana, en la costa oeste de ese país, colocaron redes en las salidas de los tubos de drenaje, las cuales funcionan como un colador y atrapan los residuos que salen de las mismas, lo que evita que tengan contacto con el agua.
El drenaje descarga el agua de las lluvias para evitar inundaciones y arrastra la basura de la ciudad hacia el río. Cuando las bolsas se llenan, se retiran y se vacían. Con una grúa, se recuperan los productos que pueden ser reutilizados. En cuatro meses de uso, las bolsas juntaron más de 370 kilos de basura.
El gobierno australiano comenzó a preocuparse por la sanidad de sus aguas hace cinco años, cuando un estudio reveló que en todo el país, por cada kilómetro cuadrado de playa había 4000 piezas de plástico.
Cada ciudad tuvo que hacerse cargo de la limpieza y Kwinana encontró una de las maneras más fáciles y baratas de Australia. Cada red cuesta aproximadamente 20.000 dólares, pero hasta el momento atraparon toda la basura que sale de los tubos y no se registró ningún animal lastimado durante el procedimiento.
La ciudad de Kwinana cuenta con unos 39.000 habitantes y la intención es llevar estas redes al resto de los ríos de la región.
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