La princesa Amalia pronunció su primer discurso oficial y contó en quién se inspirará cuando sea reina
Acompañada por sus padres, el rey Willem-Alexander y la reina Máxima, la heredera al trono de Holanda aprovechó el acto para rendirle un sentido homenaje a su abuela Beatriz
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Después de cumplir 18 años el pasado martes, la princesa Amalia de Holanda ingresó como nuevo miembro del Consejo de Estado y, para la ocasión, la heredera al trono pronunció por primera vez un discurso oficial en público: “Desde ayer, como dice solemnemente nuestra Constitución, tengo un asiento legal en el Consejo de Estado. Y eso se relaciona directamente con el trabajo que me espera. En un futuro lejano, espero”, declaró.
Relajada y sonriente, Amalia pronunció su discurso casi sin mirar el papel donde lo llevaba escrito, un signo de que de sus grandes dotes para la oratoria. En referencia a su futuro, la princesa dijo: “No hay escuela para convertirse en princesa, no como la hay para un abogado, un maestro, un panadero o lo que sea. Creo que eso significa que tengo que mirar mucho hacia el pasado, pero al mismo tiempo también tengo que moverme con los tiempos”.
En su estreno como oradora, Amalia reconoció que, aunque la edad le permita ya suceder a su padre, todavía no se siente preparada para hacerlo: “Para cumplir con mi tarea y trabajar por el reino, tendré mucho que aprender. Me doy cuenta de lo poco que sé sobre los deberes del gobierno, la evaluación de las leyes, el funcionamiento de la administración y la función del juez”.
Respecto de su futuro reinado, aunque no dijo nada en concreto, sugirió que se inspirará en el trabajo de sus antecesores: “Tanto mi abuela como mi padre, los dos jefes de Estado que he visto, le han dado una interpretación muy personal. Lo que me conmueve enormemente y también veo en ambos es el servicio y la dedicación que han brindado al ministerio”.
Como un homenaje a su abuela, la princesa Beatriz, que fue noticia en estos días por haberse contagiado de coronavirus, Amalia pronunció las mismas palabras que la royal dijo en 1956, cuando cumplió 18 años e ingresó como nuevo miembro del Consejo de Estado: “Durante mucho tiempo, miembros del Consejo de Estado, me consideraré su alumna. Yo, consciente de mi responsabilidad, intentaré ser una buena estudiante”.
De todas maneras, en principio, quedan años hasta que la princesa se incorpore con regularidad a las reuniones del Consejo de Estado. Primero, concluirá su año sabático y luego se enfocará en sus estudios universitarios. Solo después de haberse recibido, tal como lo hizo su padre, comenzará a asistir periódicamente a las reuniones, que se realizan una vez por semana todos los miércoles.
Al finalizar el discurso, la princesa estuvo dispuesta a responder algunas preguntas de la prensa, entre ellas, el interrogante acerca de su año sabático: “Es muy divertido, pero a veces también pensás: sería bueno si mis padres estuvieran ahí para decirme si deberías hacer esto o no. Llevaré esas experiencias conmigo al futuro”. Breve y concisa en sus respuestas, cuando le preguntaron acerca de sus estudios universitarios, Amalia apeló a su privacidad, tan resguardada siempre por la familia real: “Al igual que serán mis días escolares y mis estudios, lo considero privado. También porque se trata de crecimiento personal”.
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