Gary es una ciudad ubicada en el condado de Lake, en el estado de Indiana (Estados Unidos). Fue fundada a la par de la compañía de siderúrgica U.S. Steel, en 1906. Es conocida ya que en ese lugar nacieron Michael Jackson, Paul Samuelson y el premio nobel de Economía Joseph E.Stiglitz
Más allá de haber sido la ciudad que albergó a estos hijos pródigos, también es renombrada por la Iglesia Metodista de la Ciudad que fue construida en el mismo año que nació Gary. La edificación costó 1 millón de dólares (más de 7 millones en la actualidad).
La idea de sacar a los jóvenes de los burdeles
El primer pastor, en 1916, fue el Dr. William Grant Seaman, que imaginó una iglesia mucho más grande para servir a la comunidad con el objetivo de atraer a los jóvenes que pasaban muchas de sus noches en los burdeles de la zona.
El santuario forma parte de un complejo mucho más grande de nueve pisos que incluía el teatro Seaman Hall, con capacidad para 1000 personas, que contaba con oficinas corporativas, un gimnasio y un comedor.
Un año después, la iglesia contaba con aproximadamente unos 1700 feligreses que en su mayoría no estaban de acuerdo con su pastor, debido a sus intereses en la diversidad cultural, por lo que la congregación decidió transferirlo a un templo en Ohio.
Caída y abandono
La iglesia comenzó a caer conjuntamente con la ciudad de Gary en las décadas de 1960 y 1970. Gary había sido fue fundada a la par de la compañía de siderúrgica U.S. Steel y fue decayendo junto con el cambio de las actividades económicas, dejando un rastro de abandono en la fisionomía de la ciudad.
Para 1960, cuando aparecieron competidores a nivel mundial en la industria del acero, el sector industrial de Gary comenzó a decaer, llegando a perder el 50% de su población en 30 años ya que las empresas fueron cerrando y los trabajadores y sus familias debieron migrar a otras ciudades.
Incendio y deterioro
Claramente, la iglesia no fue la excepción de la ciudad y su fortuna comenzó a desmoronarse por lo que durante ese lapso fue perdiendo un gran número de feligreses. No casualmente, los índices de criminalidad en el área se dispararon, causando más salidas, y los costos de mantenimiento fueron altísimos, debido a las enormes dimensiones de la iglesia. Para 1973, solo había 320 miembros en la congregación y, finalmente, en 1975 terminó cerrando.
La estructura pasó a manos de la Universidad de Indiana, pero no se hizo nada con la iglesia. En la década de 1990, ya estaba empezando a deteriorarse, pero la peor parte se la llevó con un incendio ocurrido en 1997.
Actualmente, la iglesia es uno de los sitios predilectos para jóvenes exploradores de la ciudad. El complejo todavía sigue en pie, pero hace unos años fue incluido en la lista de los 10 monumentos más peligrosos de Indiana.