La descubrieron escondida entre un montón de escombros y cuando la rescataron quedaron impactados por su estado: “Parecía un trapo viejo”

Esa tarde, mientras recorría el campus para controlar que no hubiera problemas, algo lo obligó a detener la marcha en el estacionamiento del lugar. Allí, entre una montaña de muebles viejos, alfombras rotas, cajas con cuadernos, hojas y materiales de uso estudiantil, una pequeña figura se movió y escabulló entre las sombras.

No estaba seguro de qué era lo que había visto segundos atrás. Pero se quedó muy quieto y minutos después pudo ver como una pequeña cabeza se asomaba entre la pila de basura. Sin duda alguna ahora lo veía con claridad: se trataba de un perro que evidentemente necesitaba ayuda. Sucio, con el pelaje enmarañado y cubierto de escombros, sin explicación lógica, había sobrevivido en ese lugar.

“Le tomó tiempo pero pudo salir”

Afortunadamente, el miembro del personal de la escuela secundaria que lo había descubierto pero que no tenía idea de cuánto tiempo había estado viviendo en la pila de basura, decidió ponerse en contacto con Suzette Hall, una rescatista de la zona de South Gate, California, para alertarla sobre la presencia del perro y ponerse a disposición para ayudarlo.

Pocas horas más tarde, Hall y un grupo de rescatistas rodearon la pila de basura con puertas para bebés e intentaron atraer al asustado animal. “Se había escondido debajo de uno de los viejos sofás. Le tomó tiempo, pero finalmente se animó a ver qué pasaba a su alrededor y sacó su cabecita”. Minutos después, una pequeña perra a la que llamaron Patsy, salió temerosa de entre la pila de basura y permitió que los rescatistas le pasaran una correa alrededor de su cuello.

“Tenía velcro entre el pelaje sucio”

Los rescatistas colocaron a Patsy en una jaula antes de llevarla al Camino Pet Hospital para una evaluación completa. Sabían que había estado viviendo en la basura por un tiempo, pero se sintieron desconsolados al descubrir cuántos artículos desechados estaban atrapados entre su pelaje enmarañado. “La pila de basura estaba formada por muebles, contenedores, lámparas viejas y muchos otros artículos más. La pobre bebé parecía un trapo viejo y tenía velcro enterrado en su pelaje”.

Luego de un chequeo completo, en el hospital decidieron que lo mejor era retirar la mayor cantidad de pelo posible. el trabajo llevó horas pero, al fin, apareció la verdadera Patsy. Una vez completado su cambio de imagen improvisado, el equipo veterinario evaluó su salud. La perrita estaba deshidratada y tenía la piel irritada, pero sus dolencias eran tratables.

Han pasado algunos días desde su rescate y Patsy se siente mucho mejor ahora. Se le administraron fluidos intravenosos, se le indicó una dieta para que recuperara peso y sus nuevos cuidadores se aseguraron de que recibiera mucho cariño y amor.

Hall espera encontrarle a Patsy un hogar permanente una vez que esté lo suficientemente fuerte y confiada. Hasta entonces, seguirá maravillándose con la joya especial que ayudó a extraer de un montón de basura. “Definitivamente hemos encontrado un tesoro en la basura”, escribió Hall en Facebook.

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