La clave de la felicidad: evitar caer en la cultura del exceso de trabajo
Las investigaciones sociales registran que la satisfacción con el trabajo está estrechamente ligada a la felicidad. Un buen ingreso es un factor que incide, pero no es el único ni el más importante. Quienes se sienten más satisfechos tienden a ser aquellos que valoran más los aspectos intrínsecos del trabajo: esto es, hacer algo que a uno le gusta, en el que se puede alcanzar metas, que esté en línea con mis capacidades y que pueda hacerlo bien. Además, que permita relacionarme con otros. Un trabajo en el que pueda disfrutar, en el que pueda fluir y encontrar un sentido, un propósito. Son más felices quienes se sienten orgullosos de lo que hacen.
El trabajo es un lugar de realización y reafirmación de la autoestima, y por eso ocupa un lugar central en la vida de las personas. Pasamos muchas horas del día trabajando y el tiempo es un bien muy precioso y no es renovable. Por eso es fundamental tener claro qué es lo que queremos y necesitamos. Nuestros estudios nos guían en lo que para la mayoría es importante. Y está claro que es fundamental tener un buen balance de vida. Está demostrado que las empresas donde los empleados están más satisfechos son más productivas, más rentables y más creativas. A los fines de generar más eficiencia y más felicidad es mucho lo que pueden hacer las empresas: crear fuentes de trabajo y que los mismos sean dignos, educar en hábitos saludables y de prevención (actividad física, dieta saludable), lugares confortables, etcétera. Pero los estudios nos muestran que es fundamental evitar una cultura del exceso de trabajo y brindar posibilidades de flexibilidad laboral. Muchos trabajos pueden hacerse en todo o en parte desde los mismos hogares o hay personas que prefieren trabajar más horas menos días. Estas son cosas que las investigaciones señalan como positivas, y personalmente viviendo y trabajando en Inglaterra he visto y practicado con muy buenos resultados.
Importa comprender las necesidades de balance entre hogar, recreación y trabajo para alcanzar un mejor resultado. Un mal balance entre el trabajo y el resto de la vida ha demostrado ser uno de los más eficientes predictores de estrés. Tener en cuenta que es lo que importa y distribuir nuestro tiempo en función de las necesidades de las distintas etapas de la vida es algo en lo que debemos trabajar juntos las empresas, los gobiernos y los ciudadanos. Realizarnos en nuestro trabajo en un contexto de equilibrio entre la vida laboral y personal es una de las claves de la felicidad.
Autora de La felicidad de las naciones (Ed. Sudamericana) y presidenta de Voices!