"Jardín Blue": la iniciativa que busca revincular a los niños en tiempos de cuarentena
LA NACIONGermán Wille
La iniciativa surgió casi de casualidad. Una plaza una tarde de sol, una mamá con su hijo de cuatro años y el encuentro con otros niños y con una antigua maestra jardinera fueron los condimentos para que naciera el "Jardín Blue", una iniciativa para que los pequeños no sientan tanto la falta de los jardines de infantes en tiempos en que este tipo de establecimientos se encuentran cerrados por las restricciones a causa de la pandemia de coronavirus.
La idea, presentada como un acto de "revolución" protagonizado por niños de cuatro años, fue difundida por una usuaria de Twitter y rápidamente se viralizó. En síntesis, se trata de que los pequeños se reúnan, al menos una vez por semana, con una docente de jardín en algún espacio verde de la ciudad.
Si bien el nombre de la iniciativa juega con la idea de un "jardín paralelo" la usuaria que difundió la iniciativa del Jardín Blue aseguró que no se busca ir contra los jardines, ni fomentar la ilegalidad. Simplemente, los padres que participan de esta iniciativa solo quisieron revincular a sus hijos y "abrir el debate" sobre "los efectos del cierre prolongado de las escuelas sobre los niños".
"Si tenés hijos y te interesa, te cuento cómo fue que terminamos armando un 'Jardín Blue'", escribió en su cuenta de Twitter la usuaria Lore. El mensaje señalaba que la idea de eso había sido "de los chicos" y que la idea había sido un "acto de revolución".
El posteo, que era el primero de todo un hilo, se acompañaba con la foto de un grupo de niños junto a una persona adulta. Los niños, con sus rostros cubiertos por un emoji sonriente, y la persona adulta con un gran corazón sobre su cara.
Nace el Jardín Blue
"Hace unos días fuimos a la plaza. Ahí mi hijo se encontró con unos amigos y jugando se dieron cuenta que una de sus maestras (del jardín) del año pasado estaba en la plaza con otra chica, haciendo de niñera", escribió Lore en su segundo posteo del hilo subido el pasado 31 de octubre.
"La fueron a saludar (a la maestra) -continúa el hilo- y automáticamente se le sentaron al lado. Tipo jardín. Claro, ella había sido su maestra en sala de 1 y 3 y así la veían, aún fuera del jardín".
El posteo venía acompañado por otra foto de los pequeños rodeando a la maestra. Sentados en el césped. "Eran cinco chicos y una maestra en una ronda, después de ocho meses sin ningún tipo de contactos", decía el mensaje.
Lore continuó con su hilo relatando que la maestra, "súper canchera", había sacado algo de su bolso y los había puesto a jugar. "La idea se empezó a gestar ahí. Los chicos con sus actitudes nos estaban diciendo que necesitaban volver al jardín. Querían una maestra, ronda, amigos, juegos. PRESENCIA (sic)".
La usuaria contó que, una semana después de ese primer encuentro, la había contactado esa misma maestra para proponerle un día de juegos en la plaza, tipo jardín, pero al aire libre. Lore agregó que solamente el día anterior a ese nuevo encuentro le había contado a su hijo la noticia, porque si le decía antes no iba a poder contener la emoción.
La mujer narró luego que su hijo quiso llevar su mochila del año pasado porque con esa había ido al jardín. "Claro, la que iba a usar este año, desde marzo está colgada en su placard. Casi como ícono de la frustración que representa este ciclo lectivo 2020", escribió.
Finalmente, la mujer contó en su hilo que, el día anterior al mismo, se había realizado el primer encuentro. "Ayer fue el primer día, y todos esperamos que no haya sido el último. Y todos, una vez que pasó la euforia, tuvimos el mismo pensamiento: ¡Qué pena que no lo hicimos antes!", señalaba.
"Por eso, y en base a la experiencia que tuvimos, te invito a que lo pruebes con tu hijo", culminaba el hilo, donde la autora pedía a los usuarios que retuiteen y reflexionaba: "¿Quién dijo que los niños no pueden empezar una revolución?".
La palabra de la autora del hilo
En diálogo con LA NACION, Lore, la autora del hilo sobre el Jardín Blue, explicó algo más de la experiencia. En principio, aclaró que su iniciativa no busca para nada fomentar "la ilegalidad", ni va en contra de los jardines de infantes. "Esta es una movida que va por fuera del jardín, con el que los chicos están supercontentos. Armamos esto para revincularlos", aclaró
La mujer prefirió mantenerse anónima. Aseguró que, más allá de las muestras de apoyo a la iniciativa, recibió también todo tipo de amenazas y hubo gente que reaccionó con mucha virulencia luego de leer el hilo. Por ello es que también en las fotos se ocultan las caras de los protagonistas.
Es por ello que aclaró: "La idea no es armar plazas clandestinas sino abrir el debate sobre el regreso presencial, para que quienes tienen la responsabilidad de hacerlo, empiecen a pensar los protocolos adecuados para que se haga en ámbitos seguros para todas las familias".
"Es necesario empezar a hablar sobre los efectos que la cuarentena prolongada y el cierre indefinido de las escuelas está causando en los niños", agregó Lore, a la vez que expresó que, quienes participan de esta movida "somos familias muy conscientes del virus y de la pandemia, por eso los chicos después de estricta cuarentena funcionan como burbuja".
"Si ves la foto del hilo en donde están sentados, vas a ver que cada uno tenía una lona individual y estaban sentados en ronda y con distancia. Ese día en la plaza fueron los chicos que menos expuestos estuvieron", agregó.
"Es necesario debatir el regreso"
Lore señaló que, luego del encuentro que se ve en hilo, ha habido alguno más y que la idea es repetirlos una vez por semana. En cuanto a la docente que participa, la mujer aclaró que se le paga por cada encuentro y que no está vinculada con el jardín de infantes donde fue maestra de los pequeños.
"Fue la maestra que les cambió los pañales a nuestros hijos y los ayudo a caminar. Tenemos súper confianza con ella y los chicos la adoran por eso la vieron y para ellos es 'su maestra'", añadió.
Para finalizar, la autora del hilo volvió a aclarar que el título Jardín Blue fue para llamar la atención, pero que la intención profunda de difundir esa idea fue "que se empiece a debatir el tema" de la posibilidad -con todos los protocolos- de regresar a clases. "Si quieren que se continúe así un año más, es inviable. No se puede estar sin clases presenciales de forma indefinida".
"En el mundo desde el día uno se habla sobre el efecto de cerrar las escuelas y la cuarentena en los niños. Acá, nadie dijo nada, nunca se habló del tema. La idea es poner esto en discusión y que los que tienen que tomar decisiones se sientan en la necesidad de sentarse a pensar si hay alguna solución posible", concluyó.
No es el único caso. La semana pasada, Inés C., la mamá de Luisa, una niña de cinco años que nació con una anomalía cromosómica, reclamó también por la vuelta a la escuela, el espacio donde su hija pudo hacer los mayores progresos en su desarrollo. "Quizás perdió un año para desarrollar el habla", sostuvo.
Por Germán Wille
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