AUMENTAR LA PRODUCCIÓN Y LA CAPACIDAD DE TRANSPORTE DE VACA MUERTA: transporta 11 millones de m3 de gas por día, y con la incorporación de las plantas compresoras de Salliqueló y Tratayén podrá transportar 21 millones de m3/día. Además de que planifica que en su tercera etapa movilice 40 millones de m3/día.
EN TÉRMINOS FISCALES SE PRODUCIRÁ UNA REDUCCIÓN DE LOS SUBSIDIOS ENERGÉTICOS, no por un aumento de las tarifas, sino por una reducción de los costos.
DISMINUIR LA DEPENDENCIA DE FUENTES DE IMPORTACIÓN Y AHORRO POR SUSTITUCIÓN IMPORTACIONES DE COMBUSTIBLE: en una primera etapa, permitirá ahorrar importaciones tanto del fluido proveniente de Bolivia, por gasoducto, como del que llega como Gas Natural Licuado (GNL) en buques metaneros a las estaciones flotantes de regasificación de Escobar y Bahía Blanca. Con un efecto claro que repercute favorablemente tanto en la balanza comercial como en los subsidios energéticos. Esto es fundamental para contar con una matriz energética con mayor independencia de factores externos.
CONTAR CON UNA TRAZA CENTRAL ESTRATÉGICA QUE REFUERCE EL SUMINISTRO: mediante ampliaciones eficientes llegará al área del GBA y el Litoral con gas natural local, así como el abastecimiento de la Patagonia y Bahía Blanca sin necesidad de obras adicionales.
PONER EN VALOR EL GASODUCTO GNEA AL LLEGAR A SAN JERÓNIMO CON 20 MMM3/D: lo que permite el abastecimiento del Litoral y el Noreste, históricamente postergado, donde aún no cuentan con acceso a la red de gas o son abastecidas por propano indiluido. El GNEA es un gasoducto que fue ideado para traer gas de Bolivia. La construcción de GPNK plantea la reversión del sentido de ese gasoducto para abastecer al norte con gas de Vaca Muerta. Y a su vez, se podría utilizar esa infraestructura para exportar gas a Brasil.