El hombre contemporáneo no necesita de un frac o un esmoquin para aspirar a la elegancia, pero es posible que en el traje, la prenda que menos variaciones tuvo a lo largo de la historia, encuentre su versión más exquisita. Aquí, está centrado en Marcelo Tinelli. El conductor de Bailando por un sueño indagó en diversos cortes y fue en el slim fit donde resolvió su pinta.
La evolución estética de Tinelli fue reflejando su crecimiento profesional, de conductor a productor, hasta empresario. Tinelli no solo refrescó su producto televisivo en estos 30 años, sino que las variaciones también quedaron espejadas en su apariencia. En la actualidad, es posible reconocer un estilo Marcelo Tinelli. Se trata de pantalones que son una lección de buen calce, bléiseres que rompen el tono del total look y también lo acompañan, pero que, en definitiva, muestran una silueta delgada que evidencia un cuerpo saludable.
¡Gomazo!
La ropa puede revelar la edad de una persona, qué desea aparentar, o aportar información sobre sus actividades. A fines de los 80, la gracia de Marcelo Tinelli pasaba por la simpatía que el presentador de Videomatch resaltaba todas las medianoches. Una reunión de amigos que hablaban de deportes y los míticos bloopers eran el eje desde donde Marcelo, sentado detrás de una tarima y secundado por un micrófono, dejaba ver prendas sin ninguna pretensión y que, en contexto, lo mostraban como uno más: camisas con una camiseta que asomaba por debajo, colores que desconocían con qué paleta potenciar su imagen, las clásicas camisas a rayas grises de la marca Riccardi y un corte de pelo a ras.
Elegante sport
Las variantes del look fueron acordes al rol que Tinelli ganó en los medios. Iniciado el nuevo milenio, Marcelo comenzó a buscar su estilo en la sastrería. La evolución de su aspecto reflejaba una inquietud propia más que la idea de vestuario de un estilista. El puntapié inicial fue con los trajes amplios, las camisas blancas o negras, los chalecos y los zapatos de vestir. El pelo mutó en una melenita y en raya al medio, que le dio una apariencia más moderna. El negro fue el color que condujo sus piezas sastreras y que, tras el pase a Canal 13, en 2006, le permitió encontrar otros. Aun así, su look seguía un dress code elegante sport en código fiesta más que en identidad indumentaria.
Estilo slim fit
Marcelo usó en esta década distintas prendas que alentaron una noción de jovialidad en su imagen. Se convirtió en modelo ocasional de los jeans y de la línea sastrera de la marca rockera Ay Not Dead. Su silueta comenzó a entallarse mientras los tatuajes ganaban espacio en sus brazos. Si hay que mostrar ropa de diseño, qué mejor que los evidentes prints de Dolce & Gabbana para lucirse. Si hay una inquietud hacia la elegancia atemporal, Tom Ford. Esos son los primeros nombres elegidos por Tinelli para delimitar su nuevo yo. Entonces, comenzó a representar distintas firmas: un año fue Etiqueta Negra; otro, Liguria; luego, Mis Íntimos Amigos y Rochas. Pero más que convertir su silueta en un catálogo, Tinelli entroniza su estilo mediante la sastrería slim fit, que sirvió para que las marcas encontraran en él la representación del hombre que quieren vestir.