La franja comprendida entre el Trópico de Cáncer en el hemisferio norte, pasando por el Ecuador y el Trópico de Capricornio en el hemisferio sur, tiene una temperatura media mayor a los 18°C; esto hace que no haya invierno y las temperaturas sean de templadas a cálidas. En estos lugares se encuentran grandes reservas de orquídeas que crecen en troncos de árboles en el medio de la selva, palmeras de todas las formas y tamaños. En estas zonas se encuentran grandes porciones de selvas que oxigenan la tierra y que son la esencia del estilo tropical. A continuación, ideas y especies para generar esta atmósfera única y exuberante en el jardín.
Ilusión de selva
Un jardín de unos 100 m² se convirtió en un espacio "selvatizado". La densidad de la plantación, la conexión de unriego automático y la fertilización con un abundante compost fueron las claves que permitieron el prematuro desarrollo del jardín (construido en diciembre de 2013), junto con la estratificación de plantaciones que se elevan y participan de las vistas de los cuatro pisos.
Se dispuso una base de Arundinaria japonica, agresiva caña de hojas grandes. Delante de este muro verde, en marcados contrastes, se recortan Strelitzia nicolai, una Brugmansia suaveolens perfuma las tardes y un Ensete ventricosum que floreció en su exotismo y se transformó en la estrella del jardín. En la pared sur existe una línea de siete Bambusa vulgaris vittata que se elevarán entre 8 y 10 m. El sotobosque está compuesto de Senecio moltkei y hedychium enanos que le dan altura.
Las formas definidas y los contrastes netos proponen un recorrido y una vista general clara, algo fundamental en los espacios pequeños urbanos. El dosel (techo de la selva) se ordenó con cuatro palmeras pindó (Arecastrum romanzoffianum) y cuatro palmeras Trachycarpus sp. que se irán elevando con los años. El piso está hecho de piedra partida de construcción, en gran parte cubierto por la voraz Wedelia sp. Dos grandes sentaderas de madera (ibirá pitá) contienen el desborde vegetal. El jardín se convirtió así en un espacio de relax y esparcimiento, un abrevadero creativo que mejora la calidad de vida. Paisajismo: Ignacio Montes de Oca.
Abundancia cerca del río
La idea fue hacer un jardín de líneas sueltas, con movimiento, con muchas flores y con predominio de las plantas del Delta ya que el jardín da al río. Por debajo de un grupo de liquidámbar existente, se armó una terraza más alta contenida por durmientes, y se logró un sector de sombra para almorzar o estar, rodeado de canteros con plantas bajas: jazmines, lilas, penstemon, pasto palmera, agapantos y otras herbáceas de flor.
Hacia el río, se dio privacidad con un primer plano de hortensias y, por detrás, alpinias. Un cerezo acompaña un "codo" de la galería y, a modo de cerco para separar el sector de parrilla, se plantaron gardenias y enredaderas en las columnas. Las bouganvilleas dominan todos los bordes del terreno para que "cuelguen" hacia el agua.
En una de las esquinas del jardín había un macizo de diferentes especies bastante crecidas: Pittosporum tobira, acacias y hasta dos araucarias. En el lateral angosto que da al río se armaron canteros con Pennisetum rupelli, Buddleja davidii, litrum, gauras, penstemon y demás herbáceas. Los sauces llorones y dietes por debajo ocultan las vistas de casas vecinas. Alpinia zerumbet (alpinia). Paisajismo: Gabriela Crespo.
Jardines del mundo para contemplar
- Sólo por nombrar algunos lugares para visitar que son una verdadera muestra de especies tropicales, puede hablarse del Fairchild Tropical Garden en Miami, donde el visitante puede admirar grandes colecciones de todas estas plantas y un gran estanque con plantas acuáticas.
- El jardín Botánico de Río de Janeiro, que despliega toda la magia de texturas y colores además de la inolvidable avenida de palmeras. En nuestro país, Misiones es nuestra tierra tropical, de palmeras, orquídeas, crotones, potus, en fin, infinidad de especies que nos sorprenden en tamaño y forma al verlas en su hábitat natural.
- Si hablamos de estilo tropical no podemos dejar de mencionaral gran paisajista brasileño Burle Marx, amante apasionado de la flora de su país, que utilizaba siempre en sus diseños. Sus jardines, famosos por sus formas orgánicas y sus plantaciones en masas de gran cantidad de plantas de la misma especie, tenían un efecto de pincelada en el terreno, pintaba con plantas.
Rincones tropicales