En Tigre: Cálida unión de materiales y colores atemporales en la casa de una arquitecta que cumplió el sueño de vivir junto al agua
Partiendo de una caja limpia, Loli Clement lideró las reformas para crear un hogar fiel al estilo Mid Century, que envuelve a quien traspase la puerta.
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Qué paradoja: vivir en Tigre y no estar cerca del agua. Ese pensamiento daba vueltas por la cabeza de Loli Clement, fotógrafa y arquitecta, que siempre estaba atenta a la posibilidad de encontrar una casa con vista a un curso de agua. Hasta que al fin apareció la oportunidad y siguió el impulso inmediato de ir a verla. A medida que iba llegando, las señales resultaban contundentes: la costa extensa, la copa en flor del jacarandá que daba directamente a la ventana del que sería su cuarto y una construcción proyectada por el dueño anterior, un ingeniero, con total pragmatismo.
"Nos encontramos con una casa sólida, que tiene proporciones habitables y es muy funcional, algo que para mí es fundamental. Eso fue una gran ventaja al planear la reforma"
Arq. Loli Clement, dueña de casa
El nuevo cerramiento de vidrio repartido -que respeta la altura de las puertas- generó un recibidor que, además, funciona como distribuidor.
“Las paredes opuestas del comedor están revestidas en madera. Me pareció un buen recurso para aportar calidez al living-comedor y dejar clara la idea de darle una valoración especial a los materiales”
El estilo funcional y depurado de mediados de siglo XX fue la fuente de inspiración para la deco.
Una cocina resistente a las modas
Loli proyectó la reforma integral de la cocina, empezando por la puerta que anuló para ubicar un mueble que contiene la heladera. Además, llevaron el anafe, los hornos y la campana de la isla a la mesada.
“Cuando dibujé el mueble de la pared ya sabía qué elementos iban a la vista en los estantes, cuáles en las alacenas y cuáles en las puertas de abajo, que reservé para los electrodomésticos y los elementos del desayuno”
El comedor-diario sigue la línea de la isla, con sillas Windsor pintadas de blanco y mesa vintage de pino Oregón.
“Me gustan los estilos que perduran. Antes de diseñar la cocina pensé: ¿Cómo va a quedar esto dentro de diez años?”
Para acompañar el estilo de la casa, la antigua baranda de acero con tensores se reemplazó por una estructura de hierro que va de piso a techo. Revaloriza el bajo escalera y marca el acceso hacia el toilette. Adentro, se revistió la mesada original con una chapa doblada (que llega hasta la alzada), tratada con un proceso de oxidación. El espejo con marco de madera lustrada tiene luces de led, que destacan la textura del revestimiento.
Planta alta: mucha luz y hermosas vistas
En el primer piso, el espacio de la escalera y la ventana resultó perfecto para instalar un escritorio que comparte toda la familia. Por el pasillo se llega al cuarto principal, que en noviembre recibe el color de las flores del jacarandá. ¡Quién pudiera!
Las plantas de interior en el cuarto es una nueva costumbre que cada vez los entusiasma más.
"Hicimos la pared de la cabecera de ladrillo pintado de blanco y sin respaldo para imprimirle una estética rústica y depurada al cuarto principal".
Genial: La ropa va directamente al lavadero gracias un conducto que hicieron especialmente.
El baño en suite también pasó por una reforma profunda: el vanitory negro se cambió por el mueble de petiribí, la bañadera por la ducha con mampara, y los apliques del espejo, que estaban fijos a la pared, ahora son colgantes.
"Para ampliar el cuarto de Pilar, aprovechamos su balcón e hicimos este cerramiento que funciona como atelier y espacio de estudio. Si bien no tiene sol directo, la esterilla lo protege del calor".
Una pared gris, cortinas del mismo color y lámparas galponeras alcanzaron para renovar el cuarto de Juani.
Loli es fotógrafa especializada en alimentos y también es muy activa en Instagram. Su estudio tiene dos ventanas, lo que le garantiza distintas tonalidades e intensidad de luz a lo largo del día.
Un jardín para disfrutar todo el año
Mantener despejada la costa de la laguna fue la prioridad al plantear el paisajismo de un jardín que ofrece diferentes vistas y situaciones gracias a la variedad de volúmenes.
En la galería, lámparas globo (Electro Tucumán) como las que había en el hogar de la infancia de la dueña de casa. La mesa es un banco de carpintero. Sillas de hierro restauradas. Jardín vertical con suculentas (greenart.arg).
"Para la fachada queríamos un material que evocara la textura de la madera, y el siding resultó ideal porque da esa impresión, es fácil de aplicar y súper durable".
El living de la galería se organizó con sillones de madera y almohadones confeccionados por Loli. El piso se cambió por placas atérmicas como las que rodean la pileta. En el interior, se mantuvieron los originales.
Como no podía ser de otra manera, el lugar que más se disfruta es la orilla de la laguna y ahí instalaron los bancos de madera (La Cabaña del Tigre) y el fogón (Grill West). Los escalones y los cajones marcan las diferentes alturas del jardín. También sirven para apoyar la barra parrillera.
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