Siete de la tarde en el stand de La Frontera. Esas fueron las coordenadas para una experiencia única, que solo Ford puede garantizar este verano en Pinamar: una travesía nocturna por los médanos a bordo de la nueva Ranger.
En un clima absolutamente familiar, quienes quisieron disfrutar de la puesta del sol remontando médanos se acercaron hasta el espacio de Ford de Pinamar. Allí, pilotos especializados de la marca invitaron a los asistentes a subir a cada una de las nueve Rangers dispuestas para la ocasión. Y con los cinturones de seguridad bien ajustados, se dejaron llevar.
El circuito arranca con un hermoso sendero de arena que avanza en medio del bosque. Curvas y contracurvas se suceden hasta que de fondo se divisan los médanos. El sol está cayendo y la arena brilla con un dorado furioso. Entonces es el momento de la acción. Como cuando las Rangers encaran una verdadera colina de arena, a toda potencia y velocidad, para luego girar en lo más alto y descender por una pendiente súper inclinada. O cuando encaran la ladera de un médano y lo surfean cual tabla en el mar.
Una vez superadas las primeras pruebas, llega el momento del relax. Los pilotos encienden un fogón en medio de los médanos y reparten una sabrosa picada con agua y gaseosas. El sol ya se escondió y las luces de las pick ups empiezan a iluminar el paisaje. Es el momento del regreso, aunque todavía hay tiempo para alguna pirueta más: los pilotos se divierten derrapando y levantando arena por encima de los vehículos.
La experiencia, que hasta no hace mucho cualquiera consideraría extrema, es en realidad bien familiar. La pericia de los pilotos y la máxima seguridad de la nueva Ranger permiten que pueda ser disfrutada tanto por adultos como por chicos. La pick up de Ford viene con cuatro controles (de estabilidad, adaptativo de carga, antivuelco y de tracción) que la convierten en la más confiable y completa del mercado.
Cuando la caravana llega a La Frontera, ya es noche cerrada. Todos comentan la experiencia y preguntan por los atributos de la nueva Ranger. Para los que se la perdieron, a no desesperarse: todavía queda una travesía nocturna el próximo 14 de febrero.
LA NACION