Nicolas Puech, el multimillonario que quiere dejarle su fortuna a su jardinero
Se trata del descendiente de una de las marcas más reconocidas de moda; su maniobra legal se contradice con el compromiso que hizo en 2011 para donar su fortuna a la fundación Isocracia
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Si se habla de famosos y moda de alta gama, Hermès es una de las primeras marcas que se nos viene a la cabeza. El tiempo que se destina a cada uno de estos bolsos, hace que sus diseños sean exclusivos y casi imposibles de comprar. Con aquella idea, pero en 1837, Thierry Hermès fundó su taller de arneses en París, Francia, dedicado a abastecer a los nobles europeo; más tarde, se convirtió en un gran negocio que incorporó varios productos como carteras, perfumes y relojes, y hoy es una de las firmas más importantes a nivel mundial. Pero, ¿por qué su mayor accionista se convirtió en noticia?
Nicolas Puech es parte de la quinta generación de descendientes del fundador de Hermès. El francés, soltero y sin hijos de 81 años, se retiró del consejo de dirección de la legendaria marca en 2014, pero todavía mantiene un 5,7% de las acciones de la compañía y, aunque en 2011 dijo que iba a donar su fortuna a la fundación Isócrates, con sede en Ginebra, que está dedicada a la protección y promoción del debate público a través de proyectos de lucha contra la desinformación, cambió su opinión y generó controversia.
El secretario general de Isócrates, Nicolas Borsinger, calificó la acción como una “anulación repentina y unilateral de un pacto de sucesión, realizado gracias a un acto que debe considerarse nulo”. Asimismo, la fundación lamentó que “sus actividades de utilidad pública” se vean “amenazadas en su sostenibilidad” por circunstancias “que están completamente fuera de su control”.
Según trascendió, el empresario, uno de los hombres más ricos de Suiza, donde reside actualmente en su lujosa mansión de La Fouly, quiere dejar sus millones a un hombre marroquí de 51 años, que se desempeñó como su jardinero y empleado doméstico durante varios años. Aunque no se reveló su identidad, se sabe que está casado con una española y que tiene dos hijos.
En diciembre del año pasado, Tribune de Genève informó que, debido a su avanzada edad, el magnate había recurrido a su abogado para que solucione su situación hereditaria. “En Suiza, adoptar a un adulto no es imposible, pero sí inusual”, advirtió el medio suizo. Sin embargo, uno de los problemas que se presentó es que la ley de Suiza acepta la adopción de un adulto, pero se requiere que su relación se haya forjado en la minoría de edad del adoptado.
Mientras se espera una decisión de la justicia, esta deberá evaluar los antecedentes de sus acciones y propiedades valuadas en 5.9 millones de dólares entre los edificios en Marrakech, Marruecos y Montreux, que entran en su legado.
Cabe destacar que Puech renunció al consejo de la marca debido a una disputa familiar que se originó cuando se vendió una importante participación de Hermès a LVMH, un conglomerado multinacional francés en lujo y dueño de 76 marcas de renombre en todo el mundo. “Renunció porque se ha sentido durante varios años asediado por miembros de su familia, quienes lo han atacado”, dijo su abogado en aquel entonces. Por año, el hombre de 81 años factura más de 12.000 millones de dólares al año.
LA NACION
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