Las señales que indican que una persona es manipuladora, según la psicología
El objetivo principal de estos individuos es utilizar a los otros para satisfacer sus propios intereses, sin importar los daños que puedan generar; qué dicen los expertos
- 3 minutos de lectura'
Según la psicología, reconocer a un manipulador puede ser un desafío, ya que este tipo de conducta no siempre se presenta de manera obvia. La manipulación psicológica suele esconderse tras comportamientos que, en apariencia, son inofensivos, pero que tienen como objetivo controlar las emociones de los demás y causar daño. A continuación, se presentan las señales que le ayudarán a identificar a una persona manipuladora.
De acuerdo con el portal especializado Psychology Today, la manipulación se define como el uso de una influencia indebida a través de la distorsión mental y la explotación emocional.
Los manipuladores buscan obtener control y beneficios personales a costa de los sentimientos y deseos de las demás personas. Su objetivo principal es utilizar a los otros para satisfacer sus propios intereses, sin importar los daños que puedan causar.
Existen comportamientos específicos que suelen ser comunes en los manipuladores, y es importante estar atento a estas señales. Una de las primeras es la crítica y culpabilización constante.
El manipulador ridiculiza y señala constantemente los errores o defectos de la persona que manipula, haciéndole creer que siempre está equivocada y que nunca logrará hacer algo bien. Esta táctica está diseñada para mantener una sensación de superioridad y minar la confianza de la víctima. Además, suelen exagerar defectos y culparle de problemas que están fuera de su control, haciendo que se sienta responsable de situaciones ajenas.
Otro comportamiento típico es que un manipulador tratará de mantener el control organizando los encuentros en lugares donde él o ella se siente con ventaja, como su propia casa, su coche o su oficina. Esto busca alejar a la víctima de su red de apoyo y hacerla sentir más vulnerable, facilitando así el control.
Es frecuente que los manipuladores creen un ambiente de tensión durante las discusiones, alzando la voz o usando gestos agresivos para intimidar. Al generar un ambiente negativo, logran que la otra persona se sienta presionada a ceder ante sus demandas. También es común que ignoren o eviten a la víctima mediante la llamada “ley del hielo”, no respondiendo mensajes o llamadas, lo que crea inseguridades y aumenta el control sobre la situación.
Otra estrategia que suelen usar es victimizarse, exagerando sus problemas de salud o emocionales para generar culpa en los demás. Hacen que sus víctimas sientan que, si no acceden a sus peticiones, están empeorando su situación. Esta técnica se basa en mostrar fragilidad y dependencia, lo que lleva a la otra persona a sentir la necesidad de ceder.
Una vez que se identifican estas señales, es crucial saber cómo actuar frente a un manipulador. La primera recomendación es establecer límites claros, utilizando frases asertivas como “no me gusta cuando haces o dices esto…”.
Es importante evitar caer en discusiones impulsivas y, en lugar de ello, abordar las diferencias cuando ambas partes estén más calmadas. También es recomendable apoyarse en una red de amigos o familiares para tener respaldo emocional y así enfrentar la situación con mayor fortaleza.
Reconocer y enfrentar la manipulación no es fácil, pero al estar atento a estos comportamientos y tomar medidas, se puede proteger su bienestar emocional y evitar que la manipulación siga afectando su vida.
Autor: Susana Carrasco
Temas
Otras noticias de Psicología
Más leídas
“Pasamos por muchas etapas”. Andrea Rodríguez reveló detalles de su historia de amor con Jorge Lanata
Infancia en peligro. Desde su celda un preso condenado a 50 años de cárcel manejaba una red de pedófilos
Del boom al abandono. Cómo están hoy las rutas de Lázaro Báez en Santa Cruz, el germen del caso contra Cristina
“Es un escándalo”. Un intendente bonaerense apunta a recaudar $16.000 millones con una polémica tasa portuaria