Hallaron el fósil de una araña “gigante” de unos 16 millones de años en una cueva de Australia
Los científicos aseguran que es el segundo arácnido fosilizado más grande del planeta; las dificultades para entender su historia evolutiva
Un nuevo género de araña fósil, Megamonodontium mccluskyi, que tiene entre 11 y 16 millones de años, fue nombrada y descrita formalmente recientemente por paleontólogos australianos.
Similar al género actual Monodontium (una araña trampera), pero cinco veces más grande (con una longitud del caparazón de 10 mm, la araña entera, 50 mm de punta a punta), la araña lleva el nombre del doctor Simon McClusky, quien fue el científico que encontró el espécimen en el sitio fósil McGraths Fall, 25 kilómetros al noreste de Gulgong, en el estado australiano de Nuevo Gales del Sur.
Los hallazgos sobre este nuevo género de arañas se han publicado a mediados de este mes de septiembre en el Zoological Journal of the Linnean Society.
“Sólo se encontraron cuatro fósiles de arañas en todo el continente, lo que hizo difícil a los científicos comprender su historia evolutiva. Por eso este descubrimiento es tan significativo, revela nueva información sobre la extinción de estas arañas y llena un vacío en nuestra comprensión del pasado”, explica el autor principal del estudio, Matthew McCurry, del Museo Australiano y la Universidad de Nueva Gales del Sur.
“El pariente vivo más cercano de este fósil ahora vive en bosques húmedos desde Singapur hasta Papua Nueva Guinea. Esto sugiere que el grupo alguna vez ocupó ambientes similares en Australia continental, pero posteriormente se extinguió a medida que Australia se volvió más árida”, añadió.
El aracnólogo del Museo de Queensland, el doctor Robert Raven, quien fue el autor supervisor del estudio, dijo que esta era la araña fósil más grande encontrada en Australia y la segunda en este estado de fosilización más grande del mundo.
“No sólo es la araña fosilizada más grande encontrada en Australia, sino que es el primer fósil de la familia Barychelidae encontrado en todo el mundo”, dijo McCurry.
“Hay alrededor de 300 especies de arañas trampilla con patas de cepillo vivas hoy en día, pero no parecen convertirse en fósiles con mucha frecuencia. Esto podría deberse a que pasan mucho tiempo dentro de madrigueras y, por lo tanto, no se encuentran en el entorno adecuado para fosilizarse”, añadió el especialista en arácnidos.
El profesor asociado de la Universidad de Canberra, Michael Frese, que utilizó microfotografía de apilamiento para escanear los fósiles, dijo que los fósiles de McGraths Flat muestran un nivel sorprendente de preservación detallada.
“La microscopía electrónica de barrido nos permitió estudiar detalles minuciosos de las garras y las cerdas de los pedipalpos (especie de ‘pinzas’ articuladas que las arañas tienen junto a la boca), las patas y el cuerpo principal de la araña. Las setas son estructuras parecidas a pelos que pueden tener una variedad de funciones. Pueden detectar sustancias químicas y vibraciones, defender a la araña contra atacantes e incluso hacer sonidos”, explicó Frese.
Los científicos apuntan que, por los años de antigüedad que puede tener este arácnido fosilizado, entre 11 y 16 millones de años, su existencia en la tierra ocurrió durante el período geológico llamado Mioceno, dentro de la era cenozoica, que transcurrió sobre la Tierra en un período que comenzó hace unos 23 millones de años y finalizó hace unos 5 millones, y que precede al plioceno.
Europa Press