El ingrediente secreto de cocina para lavar ropa y ahorrar energía que es éxito
El compuesto es útil gracias a su capacidad para liberar oxígeno activo; descompone manchas sin químicos nocivos; cómo se usa y cuál es el motivo por el que abarata la factura de luz
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LA NACION
En una época donde el ahorro energético es esencial para evitar facturas de luz elevadas, cualquier truco que contribuya a bajar el consumo de electricidad es muy bienvenido. Y es aún mejor si también ofrece beneficios adicionales, como mejorar la limpieza de la ropa. Hay un producto disponible en cualquier hogar, cuya efectividad para estas dos situaciones está comprobada, pero que, por alguna razón, es un secreto bien guardado.
Este aliado en la lucha contra las manchas y el alto consumo energético es el percarbonato de sodio, un compuesto químico que, al entrar en contacto con el agua, se descompone en peróxido de hidrógeno (agua oxigenada) y carbonato de sodio (ceniza de soda). Esta reacción libera oxígeno activo, un agente blanqueador potente y natural que descompone las moléculas de las manchas sin el uso de cloro, lo que lo convierte en un desinfectante eficaz y ecológico. Además, el oxígeno liberado aumenta la eficacia del detergente al ayudar a despegar la suciedad y los microorganismos de los tejidos durante el lavado.
Para aprovechar sus beneficios, alcanza con añadir una cucharada de este compuesto junto con el detergente al lavado en agua fría. Sin embargo, es crucial tener en cuenta que no es adecuado para tejidos delicados como la lana, la seda, el lino o el cuero.
Utilizar percarbonato de sodio en agua fría elimina la necesidad de ciclos de lavado con agua caliente, lo que puede reducir significativamente el consumo de energía. De acuerdo con el Ente Provincial Regulador de Energía de Entre Ríos, el lavarropas es uno de los electrodomésticos que más energía consume, ya que llega a requerir entre 1.200 y 1.500 kWh. Gracias al uso de agua fría, el ahorro energético puede ser considerable y disminuir hasta un 80% del consumo que normalmente se destinaría a calentar el agua.
Para optimizar aún más el uso de la energía y evitar picos de demanda eléctrica, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires recomienda realizar el lavado de ropa fuera de las horas pico. Lavar temprano por la mañana o después de las 9 de la noche puede ayudar a descongestionar las redes y prevenir cortes de luz. Además, es aconsejable llenar el lavarropas a su máxima capacidad, pero sin sobrecargarlo, para maximizar la eficiencia tanto en el uso de la energía como del agua.
Otras alternativas que dejan tu ropa limpia
Usar ingredientes naturales en la lavadora no solo deja la ropa impoluta, sino que también cuida el medio ambiente y la salud, al ser menos propensos a causar reacciones alérgicas y ser más económicos que los productos químicos convencionales.
- Bicarbonato de sodio: Este ingrediente versátil es excelente para eliminar olores y grasa, así como para tratar manchas difíciles. Simplemente agregá un par de cucharadas directamente en el tambor de la lavadora o en el compartimento del detergente.
- Vinagre blanco: Conocido por sus propiedades suavizantes naturales, el vinagre blanco es una alternativa eficaz a los suavizantes comerciales. Podés sumar media taza en el compartimento del suavizante para suavizar y eliminar olores sin preocuparte por el aroma del vinagre, ya que se disipa con el agua y el movimiento durante el lavado.
- Aceites esenciales: Para quienes optan por no usar suavizantes pero desean que la ropa mantenga un aroma agradable, los aceites esenciales son una excelente opción. Se pueden agregar unas gotas de tu aceite esencial favorito directamente sobre la ropa en el tambor antes de iniciar el lavado.
- Jugo de limón: Ideal para eliminar olores de sudor, especialmente en las axilas. Aplicá jugo de limón directamente sobre la tela y dejalo actuar por 15 minutos antes de colocar la prenda en el lavarropas. Sin embargo, evitá usarlo en prendas oscuras o de colores, ya que puede alterar su tonalidad.
- Sal: Para manchas resistentes como las manchas de sangre o aceite, se aconseja introducir las prendas en agua fría con sal. De este modo, va a absorber parte de la grasitud y cuando se lave, la ropa va a quedar mejor.
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