El hombre “más tatuado de Brasil” se empezó a borrar los tatuajes y está irreconocible: “El dolor es horrible”
Tiene 35 años y, si bien llevó hasta ahora con orgullo sus diseños en la piel, se empezó a sentir como una “atracción de circo”; su dura historia de vida; [atención, los videos del proceso médico pueden herir su susceptibilidad]
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Leandro de Souza, de 35 años, es conocido por ser “el hombre más tatuado de Brasil”. Sin embargo, hoy por hoy está viviendo una sorprendente transformación. Luego de dos décadas dedicadas al arte del tatuaje, Leandro, quien alguna vez tuvo el 95% de su cuerpo cubierto de dibujos, ahora busca eliminar todos sus tatuajes en un gesto de arrepentimiento y renovación espiritual.
Así se lo confirmó a O’Globo, ya que dijo que se sentía “atrapado por los tatuajes y por eso decidió cambiar”. “No me sentía bien, ya no me convenía. Era un mundo de excesos. Llegó un momento en el que me sentí como una atracción de circo”, aseveró.
Una historia de tatuajes y sufrimiento
La historia de Leandro se volvió viral en las redes sociales cuando compartió su proceso de conversión al evangelio y en proceso de abandono de las drogas. En diferentes videos muestra sesiones de eliminación con láser de los tatuajes que anteriormente mostraba con orgullo. “Duele mucho, por más que le pongan anestesia, el dolor es horrible. Pero eso es parte del precio de las cosas que he hecho en el pasado”, afirmó.
Hace un año y siete meses, Leandro tuvo una epifanía que cambió radicalmente su estilo de vida. Dejó, “de la noche a la mañana”, el consumo de drogas, bebidas y cigarrillos. Esta decisión fue impulsada por su nueva fe y el apoyo de una clínica que ofrecía un tratamiento gratuito de eliminación de tatuajes luego de que se viralizara un video donde pedía por una oportunidad laboral.
El título que se ganó: “El hombre más tatuado de Brasil”
Leandro comenzó a tatuarse a los 13 años. “En 2023 gané el premio al hombre más tatuado de Brasil en la Expo Internacional del Tatuaje de Santa Rosa. Vivía de fiesta, tenía una vida de sexo, drogas y rock’n’roll. Los tatuajes no son cosa del diablo, no sabía cómo lidiar con eso”, dijo.
¿Quién es el hombre más tatuado de Brasil? Nacido en 1989 y adoptado por su madre con la intervención de una madrina consejera tutelar, Leandro tuvo una infancia cómoda, pero marcada por el trauma. Fue abusado sexualmente por un policía militar que frecuentaba la casa de su niñera. Cuando era adolescente, Leandro pasó un tiempo en prisión por malversación de fondos. En ese momento, la madre asistida debido a demencia senil e internada en un asilo por el Estado. “No cubrieron los gastos y dejaron la casa a la deriva. La casa fue saqueada y las facturas acumuladas durante el período que estuve en prisión. Me trataron bien en prisión porque no tenía nada que ver con nada. Pero como tatuaba allí, me respetaban mucho”, recordó.
Hace tres meses, Leandro vivía en un albergue municipal que ofrece alojamiento a personas sin hogar. Para financiar los gastos diarios y adecuar la casa para el regreso de su madre, Leandro cuenta con la ayuda de seguidores y religiosos. Creó un crowdfunding online y recientemente empezó a trabajar como fotógrafo de eventos, pero busca un trabajo estable para conseguir la tutela de su madre y traerse a vivir con él a su hijo de 10 años.
Eliminar los tatuajes, especialmente los de color en la cara, presenta importantes desafíos. Según los expertos, este proceso es complejo y requiere cuidados intensivos para evitar complicaciones. Las sesiones de láser, que se realizan cada tres meses, son dolorosas y costosas, pero Leandro está decidido a continuar: “Estoy confiado porque el equipo de la clínica es excelente y los resultados han sido satisfactorios”.
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