Aprovechando su ubicación, se priorizó la puesta en valor de la azotea perimetral, que era intransitable, y abrieron grandes ventanales sin alterar la impronta de la fachada.
- 2 minutos de lectura'
Como parte de su trabajo en el estudio de arquitectura BA|SZ, que lidera junto con Luciana Szechter, Rodrigo Battaglia llegó hasta un altillo, abandonado por décadas, al tope de un edificio proyectado por Adolfo Bullrich en 1940. Casi inmediatamente, sintió que ese espacio podía transformarse en su hogar. Junto con su socia y con la colaboración del arquitecto Adrián Presta en este proyecto, planearon una reforma inspirada en la atmósfera de las típicas buhardillas europeas, pero con detalles funcionales, cálidos y modernos.
"El departamento es tan lindo que prefiero vivir con lo mínimo y disfrutar de este paisaje único cada momento de noche y de día, cuenta Rodrigo sobre la experiencia de habitar en 23m 2"
Arq. Rodrigo Battaglia del estudio BA SZ y dueño de casa
De las opciones que pensaron para ubicar la heladera, esta fue la que más convenció al dueño de casa. El pasillo tiene el ancho justo para la única de 59 cm que hay en el mercado. ¿Da vértigo? "No, para nada". Optimizando cada centímetro, colocaron arriba el microondas. Al lado, con un haz indirecto e intenso a la vez, el artefacto longitudinal marca el recorrido desde la escalera. Ésta y los pisos son de madera maciza pulida e hidrolaqueada.
"Teniendo un ambiente tan alto, algo que ya no es común, diseñamos los muebles hasta el techo para destacar esa verticalidad", explica Rodrigo.
Los espacios de encuentro de la terraza se completaron con lavandas, olivos, westringias, laureles y otras especies de tonos desaturados que resisten el viento constante y el sol directo.
La barra de melamina se eleva sobre el final de la escalera y marca la entrada al departamento. En la cocina, el espejo duplica el paisaje en el interior y aumenta la sensación de expansión y la luz.
“En el interior planteamos tres áreas: para cocinar y comer; de estar, y de descanso. Todas integradas y, a la vez, bien definidas”.
"El objetivo principal fue integrar la terraza, que no estaba en condiciones de transitarse, con el interior. Abrimos ventanas de piso a techo y dejamos una sola pared para colgar el televisor".
Los muebles cumplen la función de guardado y delimitan los espacios, como la columna con puertas que continúa en una mesa de luz que también es cajón y respaldo de la cama. Éste tiene el largo y la altura exacta del sillón retapizado que tenía el dueño de casa, y que ahora está del otro lado, en el sector del living. Una placa unifica la parte superior de los ventanales.
Donde solo había un lavamanos, armamos un baño completo con espacio de ducha.
El baño, diseñado milimétricamente, tiene ideas para tomar nota: el inodoro ‘Bari’ (Ferrum) y la bacha son flotantes y no tocan el piso para hacer más liviano el espacio y facilitar la limpieza. El depósito de agua está embutido en la pared y la mampara es corrediza. La pared revestida en espejo tiene una raja desde donde sale un haz de luz y allí también se instaló la grifería ‘Libby’ (FV).
Qué se hizo?
Más notas de Monoambientes
Más leídas de Revista Living
Fin de semana en la ciudad. Qué ver en la edición 2024 de Casa FOA
Cristián Mohaded: "Trato de ser un nexo entre el mundo del diseño y lo hecho a mano"
Minimalista. Una casa de arquitectura moderna sorprende en el barrio de las "calles románticas"
Pasamanos de casas. La decoró para una amiga y terminó mudándose ahí años después