Emotivo reencuentro de una pareja de ancianos que habían sido separados por la cuarentena de un día para el otro
LA NACION
Un matrimonio de ancianos se reencontró después de haber quedado separado de un día para el otro por el aislamiento para detener al coronavirus. Él sorprendió a su esposa el día de su cumpleaños número 84 y pudieron volver a abrazarse.
Cuando todavía la pandemia no había estallado en Estados Unidos, Jerry Lindell, de 64 años, debió internarse en un centro de salud de ancianos -Meeker Manor en Minnesota- para hacer un tratamiento de rehabilitación. Su esposa Beverly lo visitaba todos los días sin falta hasta que la declaración de la cuarentena los dejó separados con la incertidumbre de no saber cuándo podrían volver a verse.
Beverly lloraba todos los días. Extrañaba mucho a su esposo. Lo que no se imaginó es que terminada la rehabilitación, su hija llevaría de sorpresa a su padre para que se reencontraran. "Tengo que llevar a mi padre a casa con mi madre", dijo Loriee Barnes al sitio Kare11 de Minnesota, la hija de la pareja, que organizó el emocionante momento.
El día de su cumpleaños 84, Beverly estaba en su casa cuando, de pronto, su marido Jerry entró con un ramo de flores en la mano. Ella lo miró y empezó a llorar. "Pensé que no debíamos abrazarnos, pero no podía esperar para agarrarlo, así que nos abrazamos igual y lloré, lloré y lloré", contó Beverly.
Ahora el matrimonio atraviesa el confinamiento sin separarse ni un segundo. "No lo dejaría ir", dijo Beverly y agregó, "él es mío".
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