El truco de un Premio Nobel para aprender cualquier cosa que uno quiera más rápido
Fue creado por el físico Richard Feynma, que se hizo famoso por sus descubrimientos en mecánica cuántica; en solo cuatro pasos, podrás captar información de manera más ágil y sencilla
- 5 minutos de lectura'
Seguramente tuviste que estudiar para un parcial, examen o quiz, decidiste sentarte en tu lugar de trabajo, retener información por horas y al final lograr presentar la evaluación. Sin embargo, meses después consultás el mismo tema y no recordás nada de lo que habías memorizado.
Esto puede suceder porque aplicás un método de estudio incorrecto que, en vez de brindarte las herramientas para aprender el tema de verdad, solo te ayuda a memorizar a corto plazo. El método Feynman promete un aprendizaje más certero y rápido.
¿Quién es Richard Feynan?
Richard Feynman fue un físico norteamericano que se hizo famoso por sus descubrimientos en mecánica cuántica. La formulación de integrales por camino, la teoría de la electrodinámica cuántica y la física de la superfluidez del helio son algunos de sus más reconocidos avances.
Fueron sus trabajos en electrodinámica cuántica los que lo llevaron a obtener el Premio Nobel de Física a sus 47 años, junto con Julian Schwinger y Shin’ichirō Tomonaga en 1965.
Su vida científica se basaba en la comprensión de los términos, no como algo familiar, sino como algo que se pudiera disfrutar; así esto no fuera de su completo entendimiento. Feynman no creía en la memorización de los términos.
Según él, retener la información exacta que era dada por los docentes o los libros de texto no era útil, dado que el objetivo de aprender debe ser comprender el mundo desde la perspectiva de cada cual.
”Cuando tu conocimiento de algo se basa en complejas explicaciones y términos sacados de manuales seguramente sea porque en realidad no lo entendés”, resume el medio norteamericano Business Insider.
Método Feynman
Es así como nace el Método Feyman, una técnica diseñada para aprender absolutamente cualquier cosa de forma efectiva y rápida. La idea de esta técnica es hacer que las cosas sean lo suficientemente simples para que cualquier persona pueda entenderlas.
Durante ese proceso, el individuo que lo realice podrá adquirir un conocimiento mucho más profundo respecto al tema. Bien decía Einstein: “Si no podés explicar algo de forma sencilla, es que no lo entendés lo suficiente”.
El éxito del método es que, a partir de un concepto sencillo, se pueden observar los vacíos de conocimiento. Razón por la cual es más simple profundizar en estas paulatinamente. Para lograrlo de manera exitosa, el científico planteó cuatro pasos.
Elegir el tema o concepto
No se trata solo de aplicar este procedimiento a las ciencias exactas. La palabra o materia clave de la que se parte puede pertenecer a cualquier campo del conocimiento.
Para la puesta en práctica es necesario partir de una hoja en blanco en la que se debe escribir el concepto clave que se quiere aprender, el cual debe ser claro y conciso. Luego se debe investigar a profundidad cualquier duda que se tenga del tema.
Explicarle a un niño
Para comprobar si hay un aprendizaje realmente efectivo, o si solo se creía que se había comprendido, es necesario explicar con las propias palabras todo el concepto y sus variantes a un niño o a una persona que no sea experta en el tema.
Luego, con un nuevo borrador de apuntes en el que se debe reescribir toda la información obtenida, se expondrá el tema en voz alta como si se estuviera dando una clase. La idea es desglosar el tema en conceptos sencillos para comprobar si es posible explicar con ejemplos y conexiones el tema que se estudió. Con eso es fácil identificar aquello que se ha entendido y lo que aún no se tiene muy claro.
Volver al material de estudio
El conocimiento solo se habrá alcanzado una vez que sea posible explicar el tema en términos simples. Si aún falta aclarar algunos conceptos, será necesario regresar al material de estudio utilizado en un comienzo para llenar los vacíos que se tengan.
Debe intentar explicártelo a vos mismo. Si aún recurre a expresiones confusas o frases salidas directamente del libro, quiere decir que aún falta profundizar más. Para este paso, es posible ayudarse de otros materiales como íconos, gráficos, mapas mentales, tarjetas, dibujos, cifras, entre otros.
Esta técnica permitirá que los conocimientos se retengan mejor que cuando simplemente se trata de memorizar, por lo que no se olvidará el concepto una vez haya cumplido un propósito, como un examen o prueba.
Revisar y organizar
El funcionamiento de este método es cíclico, por lo que en este paso es necesario comprobar si el concepto quedó alojado en el cerebro. Por tal motivo, debe explicarle de nuevo a una persona lo que usted quiere entender.
Esta explicación concluirá cuando el estudiante pueda formular frases sencillas y claras sin recurrir a la memoria. Con esto, el aprendizaje no será momentáneo, sino que perdurará por siempre.
Es de vital importancia recordar que el Método Feynman no funciona si el aprendiz no es sincero consigo mismo. El mismo químico decía que “el primer principio es que no se debe engañar a usted mismo, y usted es la persona que más fácilmente se engaña”.
Temas
Otras noticias de GDA
"Siempre me quedo preocupado". Cinco hábitos que terminan con la duda de si apagaste el horno antes de salir de tu casa
La había comprado con Shakira. La insólita razón por la que un grupo de jóvenes “atacó” la mansión de Piqué
Debate en Uruguay. "No voy a subir los impuestos", aseguró Yamandú Orsi y Álvaro Delgado advirtió: “Te la van a dar”
Más leídas de Lifestyle
Alerta. Qué le pasa al organismo si no consumo magnesio
Magnesio. Qué son los "hilos" blancos de la mandarina y por qué no deberías quitárselos jamás
Revolucionario. Buscaba tener dinero y descubrió una fórmula que cambió al mundo para siempre
Superalimento. La semilla que regula el azúcar en sangre, reduce el estrés y ayuda a dormir mejor