Desde hace siete años, Darío Del Casale es el estilista de los jugadores de River, también llegó a atender a Lionel Messi; sus looks marcan tendencia en el mundo del deporte
- 8 minutos de lectura'
Para algunos, el destino pareciera estar escrito. El suyo iba a ser el fútbol. Aunque claro, él no lo sabía y se presentó de la manera menos pensada. Su vínculo con el deporte comenzó a temprana edad, cuando llegó a ser arquero en Lamadrid y Excursionistas. Luego, decidió colgar los guantes y apostar al negocio familiar: una modesta peluquería en Chacarita. Cuando parecía que nada iba a cambiar, su vida dio un giro de 180 grados. Hace menos de una década, Darío Del Casale (53) se convirtió en “El Tano Fígaro”, el peluquero estrella de los futbolistas y de aquellos que buscan imitar sus looks. “Siempre sentí que me faltaba algo... No me alcanzaba con ser el peluquero de barrio”, sostiene.
-Darío, ¿cómo sucedió que dejó de ser arquero profesional para convertirse en peluquero?
-En un momento me di cuenta que con el fútbol no progresaba. Aunque había llegado a Primera División y era bueno, me di cuenta que no iba a poder vivir de eso. Entonces empecé a trabajar en la peluquería con mi papá, Hugo. En ese momento, en las peluquerías trabajaba una persona o dos, como mucho. Era una peluquería chica, de barrio.
La peluquería Il Figaro la fundó en 1972 el padre de Darío, Hugo Del Casale. Hugo, que aún atiende en la peluquería, es un italiano que llegó a la Argentina en 1960 junto con su hermano mayor. El único patrimonio que traía consigo era el oficio que le había enseñado en su tierra natal un tío.
-¿Sabía algo del oficio?
-No, aprendí de la mano de mi papá. En ese momento no había muchas escuelas, era distinto, hoy está lleno de lugares para aprender. Vengo de una familia de peluqueros y la peluquería está en el barrio de Chacarita desde hace 50 años. Es más, siempre estuvimos en la misma cuadra, antes estábamos a la vuelta, sobre la calle Roseti. Lo único que hicimos, en todos estos años, fue cambiar de local cuando crecimos.
-Pero puede decirse que en su carrera hubo un punto de inflexión, un momento en el que saltó a la fama y se popularizó entre los jugadores de futbol ¿Cuál fue ese golpe de suerte?
-Como todo comercio uno nunca sabe quién puede llegar a entrar al local y un día mientras atendía llegó un tipo muy extrovertido, con los pelos medios parados y le pregunté quién era. Me contó que trabajaba en Ideas del Sur... era el primo de Marcelo Tinelli (Luciano José Giugno), el famoso Tirri. Pegamos buena onda y él me llevó para que le corte el pelo a Tinelli. Después, en el programa, por mi look y mi estilo “personaje” me hicieron una entrevista y ahí, de a poco, comencé a hacerme conocido.
- Y la fama le gustó...
-Sí, siempre sentí que me faltaba algo... No me alcanzaba con ser el peluquero del barrio.
-¿Alguna vez fantaseó con trabajar con alguno de los peluqueros de moda de los ‘90?
-No, porque yo siempre fui peluquero de caballeros. No soy estilista ni barbero ni coiffeur. Nuestra peluquería tiene la tradición de atender hombres, por eso no atendemos mujeres. En su momento, estaba muy dividido, después llegó lo unisex.
Del barrio a la cancha
Luego de hacerle un cambio de look radical al conductor de televisión, Darío se convirtió en ‘El Tano Fígaro’. “A Tinelli lo seguían muchos jugadores de fútbol que empezaron a venir al local. Uno de los primeros que atendí fue Sebastián Driussi, un delantero de River Plate”, cuenta. Driussi debutó en ‘El Millonario’ en 2013 y actualmente juega en Austin Football Club, en los Estados Unidos.
Driussi fue la llave para entrar a River. Desde hace siete años que El Tano Fígaro es el peluquero del equipo de Núñez: “A los compañeros de Driussi les gustó tanto el look que me invitaron al Club para que les corte el pelo. Y así empecé. Iba solo y les ofrecía un combo: el corte de pelo y unas pomadas que a los chicos les gusta usar para lograr la definición del peinado, eran el enganche. Hoy todos las usan”, cuenta.
-En el último tiempo los jugadores de fútbol se convirtieron en referentes de la moda. Ellos marcan tendencia. Aparece un jugador con un look y luego todos quieren lo mismo...
-Es muy importante el tema del look en los jugadores, de hecho hay algunos que tienen asesores de imagen, como el caso de Neymar. Él, cada vez que juega un partido tiene que tener un look diferente y después todos lo quieren imitar. Esta semana, el boom fue la banderita del “Dibu” Martínez, se hace una decoloración que te dura, al menos, 20 días. Un día invitamos a la gente para que se la hicieran gratis e hicimos más de 600 banderas... una locura.
El Tano Fígaro se reconoce como un apasionado de River, aunque a veces suele decir que es hincha de la Roma para que nadie se sienta ofendido. “El día que (Marcelo) Gallardo me pidió que le corte el pelo me temblaba todo. Ahí, me volví fanático de River. Ahora, voy a su casa, él no viene acá porque si se enteran, puede provocar una revolución en el local. Además, me gusta ir a la casa de los jugadores a cortarles el pelo”, dice.
Actualmente, visita como mínimo dos veces por semana los vestuarios de River para mantener la imagen de los jugadores. “Voy dos veces por semana a cortarles y a veces, si hay partido, tres. Los chicos entrenan, se cortan el pelo, se duchan y almuerzan”, cuenta.
Hace unos días, le cortó el pelo al nuevo técnico del equipo, Martín Demichelis y se prepara para acompañar al equipo a Miami donde realizarán la pretemporada en enero. Aunque tiene una estrecha relación con River, aclara que también corta a otros planteles de fútbol argentino: “No solo hago River, también corto a jugadores de otros equipos como Independiente, San Lorenzo. ¿Boca? No, ese no. No me quieren porque estoy muy ligado a River, es entendible”, remarca.
-Ser el peluquero de un equipo de fútbol como River le habrá traído muchas anécdotas...
-La locura más grande fue cuando River salió campeón de la Copa Libertadores en 2018. Yo viajé con los chicos a Madrid. Ellos habían prometido teñirse todo el pelo de blanco, platinado, si salían campeones... y cumplieron. Fueron viniendo de a uno al local a teñirse el pelo. ¡Hasta Pinola que estaba pelado se hizo la barba! Fue muy divertido.
Con la reciente victoria de Argentina en el Mundial de Qatar al Tano Fígaro se le ilumina la mirada, pero trata de ser cauto con sus palabras y dice de manera lacónica estar “ilusionado”. No es para menos, él trató de cerca a muchos de los jugadores que integran la selección nacional. “Los conozco prácticamente a todos. A Messi, Enzo Fernández, Julián Álvarez, Paulo Dybala, Angel Correa, Armani, Giovani Lo Celso.... al Papu Gómez lo atendí el día de su casamiento, es muy divertido”, dice.
“Enzo (Fernández) me pidió para llevar a Qatar las pomadas que tenemos nosotros acá en el local, así que les mandamos unas cajas para todos los jugadores”, agrega.
“Tuve la suerte de cortarle el pelo a Messi”
-Imagino que alguno de los jugadores que atendió fue especial.
-Sí, Messi. Antes del mundial del 2014, un día de abril, vino el padre de Lionel a cortarse y yo le conté el cariño que tenía por su hijo. Él me dijo que cuando Messi viniera a Buenos Aires me iba a llamar para que vaya a cortarle. Y así fue. Un día sonó el teléfono en la peluquería, me pedían que estuviera a las cuatro de la tarde en su departamento de Puerto Madero. Fui y tuve la suerte de conocerlo y cortarle el pelo a él y a su hermano. Me quedé hasta las diez de la noche, tomando mates, conversando y me regaló su camiseta... fue increíble.
-Muchas veces los peluqueros son confidentes involuntarios de sus clientes ¿Con los jugadores sucede lo mismo?
-Si, te cuentan historias y sus cosas... yo soy muy familiero y si alguno está con problemas o por separarse me gusta escucharlos y aconsejarlos... Siempre priorizo que la familia este unida porque después rinden mejor en el club.
-¿Cuál es el corte que más piden hoy?
-Las modas fueron cambiando. En un momento se impuso el corte degradé, peladito abajo y el jopo bien largo arriba. A lo que tiene Lautaro Martínez le decimos el escobillón, es un tipo de degradé. Ahora se está usando un corte más flequillito, bien marcadito y también la cresta como Rodrigo De Paul. El “mullet” es otra tendencia que viene fuerte, es la parte delantera muy corta y la parte de atrás larga. Y los colores, los que más nos piden son los grises y las mechas.
La peluquería que está sobre la avenida Federico Lacroze, a metros de la estación, no para de recibir clientes de todas las edades a quienes Darío atiende junto con su padre y dos de sus hijos. “En el local trabajamos 15 personas y atendemos alrededor de 100 clientes por día. Aunque estamos creciendo, soy consciente de que trabajo con la gente del barrio y hay que cuidar los precios. Por eso queremos mantener un precio muy popular, 1400 pesos el corte”, dice.
Más notas de Todo es historia
Más leídas de Lifestyle
Secreto de jardín. El fertilizante ideal para hacer crecer las plantas en tiempo récord: se prepara en casa y es barato
Superalimento. La semilla que regula el azúcar en sangre, reduce el estrés y ayuda a dormir mejor
Para considerar. El alimento que un cardiólogo recomendó no incluir jamás en el desayuno
“Nunca dejó de ser un nazi”. La historia desconocida detrás de la detención de Erich Priebke: un pintor belga y una confesión inesperada