El gesto del rey Carlos III con Sarah Ferguson que terminaría con una prohibición de tres décadas

Carlos III protagonizó un nuevo escándalo dentro de los muros del Palacio de Buckingham. Ya parece más una característica que define al actual rey británico luego de asumir el puesto de su madre fallecida, la reina Isabel II. Hace horas, se dio a conocer la noticia de que el sucesor de Lilibeth invitaría a Sarah Ferguson a festejar la Navidad en Sandringham.

Con esta medida, Carlos III rompería con un “veto” que lleva 30 años en vigencia y que impuso él mismo a Ferguson, en 1992. Esta elección de último tiempo cambió por completo la perspectiva de la familia monárquica y sorprendió a más de un integrante, ya que quien fue en su momento duquesa y esposa del príncipe Andrés, volvería a un festejo real como solía hacerlo tres décadas atrás.

El “veto” a todo tipo de acceso a celebraciones reales surgió luego de que unos paparazzi fotografiaron a Ferguson en Saint Tropez, Francia, en topless, mientras el multimillonario tejano John Bryan le chupaba el dedo gordo del pie. En el momento en que circuló la primicia, Isabel II desvinculó a la duquesa de todo privilegio y la ubicó en la “lista negra”. En tanto, Carlos la desterró de su residencia de Norfolk y le prohibió todo tipo de presencia en los festejos de la familia.

Aquella noticia recorrió el mundo entero y Ferguson ocupó las tapas de las revistas más famosas. Lo cierto es que, según adelantó el medio inglés The Sun, Carlos le pondría fin a este destierro familiar de más de 30 años y habría sido invitada a participar del próximo 24 de diciembre junto al resto de los integrantes de la monarquía. Incluso junto a su ex, el príncipe Andrés.

“Estando Felipe y la reina vivos, Fergie no había vuelto a ser admitida en las celebraciones navideñas de Sandringham”, señaló el medio citado anteriormente y además destacó el testimonio de Robert Jobson, conocedor de la familia real británica, en donde consideró que: “Al invitarla a pasar las vacaciones con la familia real, el rey Carlos nos muestra de qué se trata la Navidad: familia y perdón”. Tal es el impacto de la información, que los trabajadores de Sandringham dieron inicio a la limpieza de la casona de invitados Wood Farm, que cuenta con cinco habitaciones y donde se alojaría Ferguson.

Al igual que la serie de periódicos ingleses que colmaron sus páginas con la noticia del reencuentro entre Carlos, Ferguson y Andrés, el Daily Express especuló con que la exduquesa también participaría del desfile navideño que tradicionalmente se hace hasta la iglesia de Santa María Magdalena, el 25 de diciembre. De concretarse, esto significará el retorno a la vida pública del hermano del actual rey, que tras su vinculación con la causa de Jeffrey Epstein, se le pidió no acompañar a la realeza en ningún evento.

De esta manera, la celebración de Navidad de este año sin dudas representará un cambio total para la familia real británica. Será la primera sin Felipe e Isabel como matrimonio estrella. En su lugar, Carlos y Camilla Parker Bowles oficiarán el evento íntimo y al resguardo de las emociones por la falta de la reina. En cuanto a Sarah Ferguson, quien fue señalada por Lilibeth como la “pelirroja oficial del clan”, experimentará un retorno que se hizo esperar, en donde su bienvenida podría no ser del todo bien recibida.

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