Consejos súper prácticos del arquitecto Damián Revelli, de remodelatucasa.com.ar; tomá nota y dejá tu consulta
Por arq. Damián Revelli, de Remodelatucasa.com.ar
LA PREGUNTA DE HOY: ¿Cómo hago una buena parrilla, de las que no tiran humo?
Te cuento que las parrillas "sin humo" tienen tres secretos:
1- El tiraje largo. Conviene llevar el conducto de humos bien alto (si no tenés pared para elevarlo, podés ponerle un tutor, que es un palo que engancha el tubo). Cuanto más alto sea el conducto, más eficiente será el tiraje: se genera un efecto de succión (llamado efecto Venturi) igual al que sentís en un túnel donde siempre sopla viento. El remate del tiraje tiene que tener una chimenea con protección lateral porque, de lo contrario, el viento puede hacer un efecto "tapón".
2- La campana con un pulmoncito. Para que tu parrilla funcione mejor, ponele una pequeña losa de respaldo. Tiene que estar inclinada para que el humo tienda a ir hacia la boca de la parrilla, lo que mejora la succión y genera un pulmón detrás de la parrilla (nunca lo vas a ver) que hace que el viento gire naturalmente, como si fuera un ventilador que tira el humo para arriba. Conviene rellenar el espacio detrás del respaldo para que no se junte hollín.
3- La boca no puede ser muy grande. Cuando diseñás la boca de la parrilla, fijate que sea lo más baja posible, para que el viento que entre allí. De ese modo, el humo va a querer subir por la chimenea en lugar de salir para adelante e invadir tu visión. Si ponés en Internet: "chimeneas con pulmón", vas a encontrar muchos planos y dibujos detallados.