Con hijos que reclamaban más espacio para estar con amigos y tener mascotas, la idea de vivir en las afueras comenzó a ser más tentadora que la rutina en un departamento porteño. Decididos a mudarse, Paola, su marido y sus dos hijos comenzaron a imaginar su nuevo hogar de manera muy concreta: ambientes amplios para recibir amigos, conexión permanente con los espacios verdes tan deseados y la cuota justa de intimidad.
Buenos entendedores, los arquitectos del estudio Fritz + Fritz interpretaron el pedido a la perfección y respondieron con un proyecto innovador. El resultado es una construcción sin muros interiores, donde las divisiones están planteadas sutilmente por dos jardines internos con paredes de vidrio que se abren por completo mediante un sistema plegadizo y apilable.
El living y el comedor se liberaron de columnas con una serie de vigas invertidas en el techo. La idea fue contribuir a la transparencia con los jardines internos y la apertura hacia la galería
El Travertino de los pisos se repite en toda la casa y acompaña a la perfección un proyecto de interiorismo elegantemente neto, que prioriza la comodidad y la circulación fluida.
Queríamos espacios despejados, livianos y fluidos donde cada elemento tuviera un detalle y un por qué
Los ambientes están bien definidos, pero al mismo tiempo se integran visualmente. En el living, sillón de cuatro cuerpos tapizado en bull (Landmark), almohadones de pana (Gloria Atelier Deco), mesas bajas (Centro de Diseño Italiano) y sillones individuales (Talleres Sustentables).
"Elegimos especies que dieran un look tropical, como helechos y la oreja de elefante. Todas fáciles de mantener".
Con luz natural completamente garantizada, la iluminación está dada por artefactos embutidos. Debajo, mesa de madera maciza y sillas ‘Drew’ (Landmark), espejo redondo biselado (Good Luck Casa) y cortinas ‘Multistore’ de bandas verticales (Rielamericano).
"En esta casa dan ganas de estar, de quedarse. Cuando cae la noche y se iluminan las plantas desde abajo con spots, surge una magia que se transmite a toda la planta baja".
Los jardines interiores tienen un sistema de aberturas corredizas que brindan la feliz posibilidad de disfrutarlos dentro de la casa. Además, los vidrios dobles con DVH garantizan aislación térmica, ahorro de energía y buena acustización.
"Soy una convencida de que la madera embellece la vida. Combinada con blanco, produce una calidez única", dice Paola.
En un segundo, las puertas corredizas se abren y la cocina cobra un verdadero espíritu de bar de playa. La barra con lateral de madera y banquetas para sentarse (Simet) ofrece del otro lado espacio de guardado, siempre bienvenido. Los muebles con frentes laqueados son de Madersan. A continuación de la barra, un pequeño estar frente a la tele con sillón, mesa baja (Tolder) y almohadón rayado en tussor (May Muller).
La galería ocupa todo el ancho de la construcción. Está dividida en área de parrilla, espacio para comer y living
Con una vista tan gratificante, este cuarto solo requiere de una decoración serena. Manta de lana de llama, canasto, jarrón con flores de tela, lámpara de madera con brazo flexible (todo de Galpón Chic) y almohadones rayados en Tussor (May Muller).
El mármol Travertino que se utilizó en los pisos también reviste las paredes del baño. Lejos de cansar, los materiales nobles siempre jerarquizan los espacios.
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