¿De dónde viene tu amor por el Rojo?
Viene desde la cuna; para mí, significa haber ido a la cancha desde muy chico con mi viejo. Era una cita obligada de todos los domingos y vivimos momentos inolvidables, épocas gloriosas de la vida deportiva de Independiente. Mi papá era tan fanático que me puso Ernesto como segundo nombre, gracias a Ernesto Grillo. En realidad, me quería llamar Carlos Ernesto y el primer nombre era por Carlos Cecconato, aquel viejo crack, pero mi vieja se impuso y me puso Daniel por su padre.
Independiente hoy no es lo que fue en otra época, ¿por qué?
Hay varios factores: no se replicó un Bochini por ejemplo. Aunque salieron Gustavo López o Kun Agüero, obviamente, no se pudieron quedar tanto tiempo. Y también fue una sucesión de muy malas dirigencias durante los últimos 20 años y cada vez con peores gestiones. Esta última no solo es mala, sino que rompió valores históricos de lo que era ser hincha de Independiente.
¿Sos nostálgico? ¿Creés que pronto volverán esos momentos?
Uno siempre es optimista, pero no será de la noche a la mañana, va a llevar varios años y con políticas dirigenciales contrarias a las que se manejan ahora. Me da tristeza en lo que se convirtió el club y saber que estamos muy lejos de aquellas épocas doradas.
¿El histórico paladar negro del hincha de Independiente ya fue, y ahora hay que ganar como sea?
Creo que hay una generación de nuevos hinchas que no conocen eso del paladar; entonces hay un conformismo, porque como son tantos años sin títulos hay que ganar como se pueda. Las generaciones más viejas sí mantenemos eso de jugar lindo.
En su momento, participaste en la vida política del club: ¿terminaste espantado?
Por un lado, tuve la satisfacción de haber estado en el último campeonato local que obtuvo el Rojo, jugando bien al fútbol y respetando los valores del club. Pero, para mí, fue un quebranto económico muy grande. También siento que esos años perdí algo que no tendría que haber perdido nunca: mi condición de hincha común, eso de ir a la cancha tranquilo, por fuera de toda rosca política.
Además de colecciones del ambiente del rock, debés tener algunos objetos valiosos del Rojo
Guardo muchísimas entradas, algunas de cuando salimos campeones; una camiseta de Raúl Bernao, de esas típicas de tela de piqué. Tengo varias cosas, pero muchas más hay en mi memoria, en el recuerdo.
¿Intentaste convencer a algún artista para que se hiciera del Rojo?
No intenté porque el paso de los artistas es muy fugaz y no entenderían nunca el fenómeno. Los que son futboleros ya vienen con un programa más resuelto, y la verdad es que el protagonismo internacional de los últimos años viene por el lado de Boca o River.
Completá la frase
1 Si fuese presidente del Rojolo primero que haría sería: ver el desastre que dejó Moyano y agarrarme la cabeza
2 El día que nos fuimos a la B: fue muy doloroso, me acordé de la gloria, de mi viejo, pero fue una crónica muy anunciada