Algunos dolores y molestias, como el dolor en un pie que empeora por la noche, por ejemplo, podría no parecernos grave y permanecer mucho tiempo sin tratarse. Pero a veces, se trata de síntomas que nos alertan de algo más grave, y consultar al doctor puede sacarnos la duda ¡y hasta evitarnos problemas serios de salud! Conocé estos 14 signos que te permitirán saber cuándo llamar al médico de inmediato.
- Sentís un dolor fuerte en el pecho. Si es opresivo, es importante visitar al doctor de inmediato. Según la médica de familia Lucila Bernardez, podría ser signo de infarto. Y si más bien se irradia a la espalda entre ambas escápulas, podría estar indicando una disección aórtica, de acuerdo con Betiana A. Guidetto, infectóloga del Sanatorio Anchorena San Martín y centro IPTEI. Aunque tu dolor termine siendo nada más que reflujo, es preferible ser precavido.
- Vomitás hace más de un día. Aunque esto puede producirse por algunos cuadros virales o intoxicaciones por alimentos, los vómitos pueden producir deshidratación, por lo que es importante consultar a un profesional. Si el color de las expulsiones se asemeja al de la borra del café, no dejes de llamar al doctor de inmediato, porque podría indicar sangrado interno, dice Bernardez.
- Te duele la parte baja del abdomen del lado derecho. Podría ser signo de apendicitis o peritonitis, por lo que es recomendable llamar a un servicio de guardia o de emergencias.
- Visión doble. Tener un momento de visión doble de vez en cuando, especialmente después de un día intenso de trabajo, podría ser normal. Pero si aparece de la nada, permanece y solo se detiene cuando te tapás un ojo, es mejor consultar, ya que podría indicar un número de cosas: desde una disección aórtica o una embolia pulmonar, una arritmia o hasta neumonía.
- Tenés la presión arterial mayor o igual a 180/100. Es importante tratarla de inmediato, ya que podría producir un ACV o daño multiorgánico, dice Guidetto.
- No podés mover la mitad de la cara, brazo o pierna, o sentís extrema debilidad de un lado del cuerpo. Puede ser signo de ACV, por lo que sería importante que consultes a un profesional lo antes posible.
- Se te dificulta mucho hablar o tus familiares no comprenden lo que decís. De nuevo, podría ser un signo de ACV, por lo que consultar al doctor es imperativo.
- Sentís un dolor en la pierna o pie, que empeora a la noche. Podrías tener una pequeña fractura por sobrecarga, que podría agravarse si seguís caminando sobre ella. Mejor, consultar.
- Te duele la parte baja de la espalda sobre el lado derecho. Si no te lastimaste un músculo recientemente, podría ser signo de apendicitis.
- Sudor repentino sin razón. Podría ser simplemente por la fiebre, pero si tu temperatura es normal, consultá al médico, para descartar que sea un signo de infarto, disección aórtica, embolia pulmonar o arritmia.
- No podés hacer pis hace 6 horas o más. Cuidado: podría indicar deshidratación o incluso insuficiencia renal aguda.
- Tenés diarrea sanguinolenta y fiebre. Podría ser signo de infección, dice Guidetto.
- Fiebre alta y dolor de cabeza intenso. Podrían ser síntomas de meningitis, especialmente si también tenés vómitos.
- Sentís un dolor repentino y agudo en la pierna o pie. Podría estar alertando de isquemia aguda (cuando la sangre no llega a un determinado tejido tisular, por la obstrucción del flujo sanguíneo en una o más arterias).
Si experimentás alguno de estos síntomas, recordá un llamado telefónico rápido o una visita a la guardia, podrían ahorrarte problemas de salud más graves en el futuro. Y si resulta que no era nada para preocuparse, ¡mucho mejor!
Por Sofía Orsay
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