Coronavirus: rutinas de desinfección para evitar el contagio

El COVID-19 más conocido como Coronavirus llegó finalmente a Argentina y, para evitar que esta nueva enfermedad se propague, debemos intensificar la prevención.

Para eso -para poder tomar las medidas necesarias- es clave entender primero cómo es que se propaga el COVID-19. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) una persona puede contraer la enfermedad por contacto con otra que esté infectada por el virus. Ese contagio se puede dar de las siguientes maneras:

Puede ser al inhalar las gotitas que son expulsadas por la boca o nariz cuando una persona infectada tose o estornuda.

Puede ser al tocar superficies u objetos con presencia del virus y luego llevarse las manos a la boca, a la nariz o a los ojos.

Esto se produce cuando una persona infectada tose o estornuda y esas gotitas que salen por su boca o nariz se depositan en superficies que luego son tocadas por otra persona sana que se lleva sus manos a la boca, a la nariz o a los ojos. Así el virus puede ingresar a su organismo.

De esta manera -y como sucede en general con las enfermedades de tipo respiratorio- la higiene personal y de los espacios que habitamos es hoy el principal elemento que tenemos para contribuir a evitar los contagios del Coronavirus.

Una a una, las medidas de higiene personal

La OMS enfatiza en que las formas más efectivas de protegerse a uno mismo y a los demás frente al Coronavirus son:

• Lavarse las manos con frecuencia para matar los virus que pueden estar en ellas. Un lavado efectivo debe durar al menos por 20 segundos y realizarse en ambas caras de la mano, frotando las áreas entre los dedos, alrededor de las uñas y entre los anillos. Es importante no olvidar lavarse las manos antes de comer o manipular alimentos, luego de ir al baño, siempre que regresamos al hogar, después de toser, estornudar o soplarse la nariz. Y si no se dispone de agua y jabón, entonces es recomendable el uso de alcohol en gel.
• Cubrirse la boca con el codo flexionado o con un pañuelo de papel al toser o estornudar. Esto sirve para no diseminar las gotitas de saliva que se expulsan y evitar así la transmisión a través de las manos (porque si nos tapamos la boca o la nariz con las manos al estornudar o toser y luego tocamos objetos podemos contaminarlos). Tengamos en cuenta también que debemos descartar de inmediato los pañuelos usados.
• Mantener una distancia de al menos un metro con las personas que tosen o estornudan .Cada vez que alguien tose o estornuda despide por la nariz o por la boca unas gotitas de líquido que pueden contener el virus. Si se está demasiado cerca, entonces se podrían respirar esas gotitas y con ellas el virus del Coronavirus COVID-19 si es que la persona que tose tiene la enfermedad.
• Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca Las manos tocan muchas superficies que pueden estar contaminadas con el virus. Y una vez contaminadas las manos pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca, desde donde es capaz de entrar en el cuerpo y causar el contagio de la enfermedad. Para tener en cuenta -y aunque parezca curioso- está comprobado que los adultos tocan su cara 15,5 veces por hora; 2,5 los ojos; 5 veces la nariz y 8 veces los labios, lo cual representa una puerta abierta al ingreso del virus (según reveló Charles P. Gerba en Reinventing Hygiene for the 21st century).

Lo que tenemos que hacer en el hogar

Si bien aún no se sabe con certeza cuánto tiempo sobrevive el virus causante del Coronavirus COVID-19 en una superficie, este parece comportarse como otros coronavirus ya conocidos. Y los estudios realizados indican que los coronavirus pueden subsistir en una superficie desde unas pocas horas hasta varios días. Ese tiempo puede variar en función de condiciones como el tipo de superficie, la temperatura o la humedad del ambiente.

De esta manera resulta importante intensificar las rutinas de limpieza y desinfección en el hogar y en los espacios que habitamos. Para que la limpieza sea efectiva debe utilizarse un producto que no sólo sea útil contra la suciedad, sino que también desinfecte. Es decir: que garantice la eliminación de gérmenes.

Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y también la Agencia de Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos (en inglés, Environmental Protection Agency, más conocida por las siglas "EPA") sugieren para ayudar a reducir el riesgo de contagio del COVID-19 el uso de productos desinfectantes domésticos como la lavandina o las toallitas desinfectantes. En este sentido, la lavandina y las toallitas desinfectantes son productos que, usados de acuerdo a las instrucciones de sus etiquetas, eliminan el 99,9% de virus y bacterias y sirven para aplicarse en múltiples superficies.

Pero además de las superficies del hogar, también se recomienda la desinfección de los objetos que nos rodean para ayudar en la prevención de posibles contagios por COVID-19. Esto se refiere más que nada a los objetos de uso común como manijas de puertas, celulares, interruptores de luz, controles remotos, canillas de cocina y botón del inodoro. Como se trata de elementos que solemos manipular seguido, mayor es su posibilidad de tener virus y bacterias.

Para la desinfección de objetos una alternativa especialmente práctica son las toallitas húmedas desinfectantes que hace tiempo pueden encontrarse en el mercado y cuya fórmula también garantiza 99.9% de efectividad contra virus y bacterias. Las toallitas húmedas desinfectantes resultan una opción fácil y efectiva en la eliminación de gérmenes porque vienen listas para usar, sólo deben pasarse por el objeto y desecharse después. Para eso es importante leer atentamente las etiquetas de estos productos y utilizarlos de acuerdo a las instrucciones de uso establecidas.

La mejor forma de protegernos es cuidar la higiene personal y del hogar. Con algunas acciones simples estaremos haciendo una notable contribución para ayudar en la prevención y control del nuevo Coronavirus.

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