Coronavirus. Asistencia al viajero: “En el futuro, nadie va a escatimar en términos de salud”
La industria del turismo tiene múltiples dimensiones con muchísimas divergencias entre unas y otras, pero con un punto en común: la pandemia golpeó a todas. El segmento de asistencia al viajero, por ejemplo, se quedó de un día para el otro sin viajeros que asistir. Assist Card, una de las empresas más reconocidas del sector en la Argentina, con presencia en 36 países y más de 1.350 colaboradores, se encontró ante un desafío inédito.
"El negocio se paralizó por completo, con un impacto mucho mayor que el que sufrimos cuando fue la crisis de 2001, porque en este caso se trató de un problema de alcance mundial", define Alexia Keglevich, CEO global de la compañía. Ante un escenario de fronteras cerradas y restricciones a la movilidad, la empresa –que tenía unos 20 millones de clientes anuales en todo el mundo antes de la crisis sanitaria del coronavirus- inició un rápido proceso de reconversión.
Varados y asistencia...en el hogar
Por un lado, se innovó en la oferta de productos y servicios para dar valor al importante número de viajeros varados: personas a las que la pandemia las encontró en una tierra lejana y que no lograron volver antes del cierre de fronteras. "Fuimos la primera empresa de la categoría en decir ‘sí’ a la pandemia, independientemente de las condiciones generales", indica la CEO. Para atender a este segmento, se creó un producto específico con una validez de treinta días, renovable, que abarca telemedicina y médicos a domicilio.
Aquellos que por la cancelación masiva de vuelos no pudieron viajar quedaron con el contrato abierto hasta el 31 de diciembre, de forma que se pueda reprogramar la vigencia cuando existan más certezas sobre adónde y en qué condiciones se puede ir.
Por el otro, se lanzó Medicall, una nueva unidad de negocios que consiste en dar atención médica domiciliaria o a través de videollamadas. "Decidimos redireccionar nuestro expertise de salud en el mercado local, enfocando nuestros esfuerzos en brindar servicios de asistencia médica primaria a todos los miembros de la comunidad, sin necesidad de que se encuentren de viaje", destaca Keglevich. "A los clientes con tarjetas anuales para múltiples viajes se les extendió el beneficio de Telemed, solución de telemedicina, en su lugar de residencia", agrega.
¿Cómo se recompondrá la industria en el corto plazo?
"Los líderes debemos ser cautos respecto a cómo será la nueva normalidad, en especial porque el entramado del turismo involucra a múltiples actores", sentencia Keglevich. "Es importante el trabajo articulado de todos los actores para garantizar una pronta recuperación de la industria", agregó. Es que, según la ejecutiva, a diferencia de otras crisis, en las que el turismo es la primera en contraerse y luego reactivarse, en esta oportunidad demandará mayores esfuerzos y consenso. "Habrá que ir evaluando las tendencias de cómo será ‘el viaje del futuro’ y cómo se alinearán con las medidas sanitarias correspondientes", vaticina Keglevich.
La experiencia de viaje y el perfil del viajero post-COVID-19 mostrarán, augura, un cliente más precavido, exigente y consciente del cuidado de su salud. "No me imagino un futuro próximo en el que, por un lado, los viajeros salgan sin una asistencia integral que los proteja en sus improvistos médicos y no médicos, y, por otro lado, que los destinos del mundo no se lo exijan a los turistas para permitirles el ingreso", explica Keglevich. "En los viajes del futuro nadie volverá a escatimar cuando se trate de salud", concluye.