"Conocí a un extranjero, él volvió a su ciudad y seguimos hablando, ¿somos pareja?"

Hola Consuelo,

Hace ocho meses conocí a un chico extranjero en los carnavales de mi ciudad, en Colombia, que duran tres días. En esos tres días salimos a los distintos desfiles y la pasamos muy bien... incluso él tuvo la oportunidad de conocer a mi familia en uno de los desfiles a los que asistimos y se llevó muy bien con todos. En el tercer día que nos vimos, terminamos besándonos y agarrados de manos como si fuéramos novios. Él siguió su rumbo hacia a otra ciudad para conocer y yo me quedé aquí en la mía. En medio de su paseo me escribió pidiendo que por favor fuera hasta donde él estaba, pues me extrañaba mucho. Finalmente accedí, y pasamos una noche parecida a una luna de miel en Cartagena; después de eso, seguimos hablando hasta el día de hoy al menos una vez por semana, nuestras conversaciones son muy amenas y la verdad no tienen nada o muy poco que ver con sexo.

Los primeros meses después que hubiera regresado a su país (Inglaterra) fueron idílicos: parecíamos una pareja, incluso llegó a preguntarme qué requisitos necesitaba para ir a Londres a visitarlo y comenzó a buscar vuelos, pero el tema quedó en nada y no lo volvimos a tocar. Él trabaja con una multinacional que tiene sede en Colombia y me decía que quería ver la posibilidad de mudarse aquí pero al igual que lo de la visa este tema solo fue tocado una vez y nunca más me habló de ello. Sin embargo, mantuvimos el contacto hasta el dia de hoy, tanto que quiere regresar a Colombia a pasar Navidad y Año Nuevo junto a mí y mi familia y quiere además que lo acompañe también a viajar: pero mi mayor confusión es que no me ha tocado el tema de mantener una relación formal. No sé qué pensar, la verdad no me quiero ilusionar esperando algo que puede que suceda pero también puede que no. ¿Qué le diré a mi familia? No sé ni qué decir o qué pensarán ellos también cuando lo vean aquí. No quiero levantar sospechas ni que se hagan ilusiones de nada al igual que yo. Pues la verdad no sé qué somos. ¿Debo pensar que si no me lo ha pedido es porque es un no? ¿O tal vez es una persona muy pragmática que hasta no tener todo planeado no comenta ni dice nada a menos que vea que puede darse por hecho? Ayuda, bájeme de esta nube o dígame qué debo hacer.

Un dato: él tiene 29 y yo tengo 22. Ambos trabajamos, no tenemos hijos ni parejas. Somos personas técnicamente libres en ese aspecto.

Atentamente,

La Enamorada del Carnaval (22)

Querida Enamorada del Carnaval:

¡Qué culebrón el tuyo! Tu relato me hizo pensar en la característica central de las relaciones hoy: la incertidumbre. En otra época más o menos "se sabía" qué significaba conocer a la familia, tener un par de salidas, mandarse cartas o tener sexo: todas esas cosas tenían un significado claro y socialmente compartido. Hoy, en cambio, todas esas situaciones tienen un sentido distinto para cada persona y en cada caso: la mitad de los mails que recibo tienen que ver con eso, "qué me quiso decir", "qué significa esto", "esto implica que me quiere o no implica nada". En fin: la libertad es un malentendido eterno.

En tu caso, propongo separar algunas cuestiones: primero, el tema de tu familia, qué les vas a decir, qué van a pensar. Tenés dos opciones: o les decís que es un amigo sin hacerte mucho problema o directamente evitás que se crucen con tu chico y le decís que se quede en un hotel. ¡No vas a ponerte de novia con alguien solo para darles explicaciones a tus padres! Si te parece que a ellos les va a resultar demasiado raro que pase las fiestas con ustedes si no es tu novio, le decís a él que te parece que no da y listo. Ya es suficientemente difícil construir relaciones como para encima preocuparte por lo que piensa un tercero.

La segunda cuestión el tema del viaje, y creo que para vos está muy conectada con esta idea del compromiso: vos no vas a dejar tu vida por alguien que no te diga que es tu novio o que quiere construir una pareja con vos, y él hasta ahora no lo ha dicho. Lo cual es razonable: por lo que me contás, apenas se conocen, pasaron unos días juntos y después solo conversaron. Pero también es medio raro ponerse de novio con alguien sin haber pasado ni un mes en la misma ciudad, de modo que entiendo que él no lo haya sugerido. Yo antes que proponer esa conversación trataría de ir más despacio, ver qué pasa en el próximo encuentro: quizás a él le copa la idea de vivir en Colombia un tiempo, o que vos viajes, pero obviamente no puede proponerte casamiento si apenas pasaron tiempo juntos. Vos pensalo de la misma manera: si te divierte ir a pasar un tiempo en Londres y tenés la posibilidad, hacelo, pero no lo hagas "por él", porque si dejás toda tu vida por un muchacho que conocés poco, aunque te ofrezca casamiento, sin ningún plan allá, las probabilidades de chocarse contra una pared son altas. Es demasiado para cualquier relación.

Mi consejo, entonces: no empujes nada. Si te divierte recibirlo lo recibís, sin expectativa de que eso se convierta en nada más que esto, un vínculo de pasarla bien juntos cuando logran cruzarse. Si te divierte viajar, lo mismo. Pero es muy pronto para conversar sobre el futuro. Si se ven una vez más y la cosa va avanzando, ya pueden sentarse a charlar sobre cómo hacer para construir algo juntos.

Un cariño,

Consuelo

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