Para exteriores e interiores, pasillos y dormitorios, baños o cocinas, las alfombras son un accesorio clave para completar la ambientación y dar calidez a los ambientes
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PARALELAS Y VERTICALES. Para grandes livings o pasillos angostos, las alfombras de RUGit visten espacios con estilo y funcionalidad en distintas dimensiones: son especialmente recomendadas para hogares con niños y mascotas porque son 100% lavables. El secreto para limpiarlas es simple: sólo agua (en bañadera o con manguera), aunque también se puede usar jabón dependiendo del tipo de mancha. Los diseños son tejidos en telares manuales con fibras de polipropileno de alta calidad. También tienen la colección de Facundo Lhez, con alfombras pura lana, de nudo, kilims y antiguas (persas, afganas, iraníes y turcas).
DE PUNTO RÚSTICO. Las alfombras de Awanay son tejidas a mano en el monte santiagueño y en La Puna. Los artesanos que las confeccionan viven en casas de adobe y trabajan desde allí con vistas al inspirador paisaje norteño. Utilizan lana de oveja y de llama hilada, ambas teñidas a mano con tintes naturales, procesos que le dan a las alfombras la “perfecta imperfección” e irregularidad de las piezas únicas. Además de los modelos en stock, todas las alfombras se pueden personalizar y pedir en cualquier medida.
EXPERIMENTOS ARTÍSTICOS. Desde su “Laboratorio”, un espacio de experimentación y producción artística, El Espartano trabaja junto a diseñadores para crear colecciones únicas. Una de ellas, “Malla”, estuvo a cargo de Cristian Mohaded: las alfombras están hechas con lana 100% virgen de pelo cortado y bouclé, y sus patrones gráficos irregulares refieren a distintos fenómenos naturales. Por otro lado, junto a Galpón Estudio la marca desarrolló “Palabras”, una serie de alfombras para recibir que propone una nueva versión del felpudo de entrada: están hechas con pelo cortado (80% lana, 20% nylon) y tejido de polipropileno. Entre las novedades de El Espartano está la nueva colección de carpetas “Minka”, con figuras de hexágonos y diamantes en tonos negro y tiza.
INSPIRACIÓN DE MEDIO ORIENTE. Todos los años desde el 2003, el equipo de Kasbah visita Marruecos para elegir, una por una, las alfombras de su colección. Son hechas a mano por mujeres bereberes que confeccionan kilims y tapices con lana 100% de oveja, creando piezas únicas en sus colores, flecos, puntos y terminaciones.
DE AUTOR. Entre las colecciones de Design Carpets se encuentra la de la artista plástica Analía Segal. Es una serie de 10 alfombras Hand Tufted, tejidas en 100% en lana premium con terminación artesanal. Las piezas tienen un trabajo de biselado y recorte que propone un sistema de altos y bajos relieves con diferentes texturas (pelo cortado aterciopelado, pelo largo, bucle) y dimensiones.