Compraron una casa por medio millón de dólares y se la devoraron las termitas
LA NACION
Shaun y Sara Sarson compraron una casa idílica ubicada entre palmeras en Gold Coast, contra la costa este de Australia. Por ella pagaron 660.000 dólares australianos, el equivalente a poco más de US$ 480.000. Pero a menos de un año de mudarse con sus dos hijos, de 2 y 3 años, se dieron cuenta de que en realidad la casa no les pertenecía a ellos, sino a las termitas.
"Pusimos nuestra vida en esto. Todo el dinero que tenemos, y más, porque todavía estamos pagando la hipoteca de una casa en la que no podemos vivir", dijo la mujer al programa de televisión australiano A Current Afair.
La pareja hizo lo correcto, y antes de comprarla, encargó una inspección de plagas, cuyo diagnóstico fue que no había evidencia visible de actividad o daño causado por termitas. Lo primero que se devoraron los insectos fueron los baños, pero desde adentro.
Apenas tres meses después de mudarse, Sara Sarson fue a enchufar el cargador de su celular y se encontró con que de la toma del baño salían miles de estos pequeños devoradores rojizos.
En ese momento, llamaron a otro experto en plagas. "Sabía que había mucho daño por la inspección inicial que hice, pero cuando sacamos las paredes me quede asombrado", aseguró Daniel Golin, "están en todos los cuartos, en cada parte de la casa, Sería muy difícil reconstruirla, creo que en este estado lo mejor es demolerla".
Para colmo, la pareja se puso en contacto con otra persona que había estado interesada en comprar la casa antes que ellos. Esa persona les dijo que se negó a comprarla luego de llevar a cabo una inspección y darse cuenta de que efectivamente la casa estaba infestada de termitas, información que le pasó al agente inmobiliario.
"En realidad, no tengo obligación de revelar los resultados de una inspección de plagas pagada en forma privada por otra persona", dijo al ser consultado por el programa el agente en cuestión, Anthony Broomhall, ateniéndose a las leyes del estado australiano de Queensland.
El antiguo dueño de la casa también negó responsabilidades y dijo que no estaba ni enterado de que había termitas en el inmueble. Mientras tanto, la pareja australiana espera la respuesta de la aseguradora de la casa, que también está llevando a cabo su propia inspección.
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