Claves a la hora de elegir un extractor de aire para tu cocina

Por arq. Gustavo Peláez.

Especialmente diseñados para eliminar los olores y vapores por la cocción de la comida y en las que están muy conectadas con otros espacios. La función principal es eliminar olores.

Si tu cocina tiene salida al exterior, lo ideal es utilizar un extractor de los que expulsan el aire 100%. El caudal a extraer debe ser 8 veces por hora el que contiene la cocina (dependiendo del uso). Para calcularlo, multiplicá el largo por el alto y el ancho del espacio. Restá un 30%, que es lo que ocupa, en promedio, el equipamiento del ambiente. El conducto de extracción, generalmente, rondará los 10 ó 12cm de sección. Cuando no se está limitado por muebles o paredes, el ancho ideal de la campana no debe exceder los 15cm de la cocina. Estos artefactos son de fácil mantenimiento; lo más importante es conservar el filtro metálico siempre limpio. El motor del extractor puede ser interno o externo. Cada caso requiere de una evaluación previa para definir qué tipo de motor es conveniente. Se deduce de los metros de conductos, cantidad de curvas y frecuencia de uso, entre otras características.

Una segunda alternativa dentro de este grupo de extractores son los equipos de pared, que consisten en simples ventiladores, similares a los que suelen ubicarse en baños y toilettes.

Hay otro grupo de extractores (menos efectivo) que se utiliza cuando no hay forma de enviar el aire al exterior. Son los que realizar la limpieza del aire por medio de filtros de carbón activo y luego lo devuelven purificado al ambiente. Los filtros de estos equipos deben reemplazarse una o dos veces al año. Son ideales para monoambientes, donde generalmente la cocina dista del exterior.

Estas segundas opciones son también alternativas para cocinas donde los codos y tramos de cañería son demasiado extensos, quitando la extracción potente que caracteriza a los equipos con salida exterior.

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