Debate ético: en Chinadicen haber creado bebas modificadas genéticamente
WASHINGTON.- El científico chino He Jiankui provocó conmoción en la comunidad mundial al afirmar que había editado el ADN de embriones humanos. Del ensayo habrían nacido hace unas semanas dos niñas gemelas, Lulu y Nana, de las que dijo que eran "tan saludables como cualquier bebé" .
El controvertido experimento, publicado por medios periodísticos y videos dados a conocer por He en YouTube, fue criticado por científicos de todo el mundo. Se lo considera prematuro y "deshonesto".
En una carta, más de 120 científicos chinos lo calificaron de "locura" y agregaron que le dio un gran golpe a la reputación mundial de la ciencia china. Southern University dijo, en un comunicado, que investigaría lo sucedido y que He parecía haber "violado gravemente la ética académica y los códigos de conducta".
La afirmación no verificada se produjo en vísperas de una cumbre internacional dedicada a discutir la ciencia y la ética de experimentación con herramientas poderosas que brindan un potencial sin precedente para modificar rasgos y eliminar enfermedades genéticas, pero que han aumentado los temores de crear "bebés de diseño".
Al modificar embriones humanos, esos cambios pueden transmitirse a los descendientes de esa persona, lo que abre la posibilidad de alterar la especie humana.
"Aquí tienes a un científico que está cambiando la raza humana, y tienes un video de YouTube al respecto, sin ningún documento [científico]. Es casi surrealista -dijo Eric Topol, fundador y director del Scripps Research Translational Institute, que dijo haber visto algunos de los datos detrás del experimento-. Básicamente, por primera vez en la historia habría usado esta poderosa herramienta de una manera imprudente sin una buena razón".
Violación de las normas
He, que trabajó en secreto y está con licencia sin goce de sueldo de su universidad, dijo a The Associated Press que habían editado embriones de siete parejas que se sometieron a fertilización in vitro usando una técnica llamada Crispr para bloquear un gen que permite que el VIH ingrese en las células. Uno de los embarazos terminó en el nacimiento de las gemelas.
El científico no respondió el correo electrónico ni el teléfono.
"Creo que esto muestra que es el momento de hablar sobre la ética de la edición genómica -dijo Insoo Hyun, especialista en bioética de la Universidad Case Western Reserve-. Aunque no sabemos cuánto de esto es verdadero. A estas alturas, no son más que rumores".
Según una descripción del experimento publicada online, He creó embriones a partir de óvulos y espermatozoides de parejas en las que el padre vive con VIH y los modificó con la técnica Crispr. Los especialistas inmediatamente hicieron oír sus críticas, ya que existen otras formas de prevenir la transmisión del virus, y muchos piensan que las primeras aplicaciones de la edición de genes deben reservarse para enfermedades mortales y sin tratamiento.
He dijo que había modificado un solo gen por el procedimiento de edición, pero se sabe que la edición de genes introduce efectos no intencionados que podrían generar problemas, ya sea para los propios niños o para el genoma humano si estos crecen para transmitir sus genes.
También explicó que su experimento había funcionado y que la edición genética no había producido ningún cambio involuntario en el ADN de los niños, pero Topol dijo que "francamente no es posible" hacer esa afirmación y agregó que ahora la descendencia de Nana y Lulu se vería afectada de una manera que nadie entiende bien.
He, que también es fundador y presidente de Direct Genomics, una compañía de secuenciación de ADN, trató de diferenciarse de aquellos que intentan crear bebés de diseño. "La cirugía genética debe emplearse para la curación. Mejorar el coeficiente intelectual o seleccionar el color del cabello o los ojos no es lo que hace un padre amoroso. Eso debería prohibirse -dijo en uno de los videos-. Entiendo que mi trabajo será controvertido, pero creo que las familias necesitan esta tecnología y estoy dispuesto a aceptar las críticas por ellas".
El anuncio fue muy poco convencional, sin la publicación en revistas de revisión por pares. "Si es cierto lo que se informó, es un experimento extremadamente prematuro y cuestionable para crear niños genéticamente modificados -dijo Jeffrey Kahn, director del Instituto de Bioética Johns Hopkins Berman-. Hay mucho que discutir sobre la falta de transparencia".
Matthew Porteus, pediatra e investigador en células madre de la Universidad de Stanford que está en el comité organizador de la reunión en Hong Kong, dijo que el anuncio pone en evidencia las debilidades del sistema regulatorio actual. "Esta no es la forma en que me gustaría que avance la ciencia. Tengo serias preocupaciones", dijo Porteus.
La Southern University of Science and Technology, institución donde He actualmente se encuentra con licencia no remunerada, emitió una declaración en la que condenaba el experimento y dijo que la universidad estaba "profundamente conmocionada" por la noticia. La investigación se realizó fuera del campus y la casa de estudios desconocía el proyecto.