En estos cuartos de baño se utilizaron colores suaves, detalles femeninos y muebles recuperados con el mismo objetivo: lograr una ambientación rústica y luminosa
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PROPUESTA A
* Al mesón reciclado que ocupa todo el ancho del baño se le hizo una tapa de cemento alisado.
* Para darle al ambiente una estética lúdica sin limitarse a lo estrictamente infantil, el cartel ‘Bathroom’ que remata el frente es obra de la dueña de casa: lo hizo usando una tabla y letras forradas con papeles importados.
* Otro elemento de carácter: en la bañadera, en lugar de una jabonera estándar se usó una canilla antigua soldada sobre una rejilla (Villatte).
PROPUESTA B
* Reciclar contundentes muebles de negocios y talleres es una solución original. En este caso, sólo se reguló su altura. Los cajones que están rotulados "algodón" o "frascos" son los originales del mueble de cedro; otros se hicieron a nuevo con pino y se forraron con lienzo estampado (Sociedad de Diseño).
* Sin tratamientos especiales, el piso de cemento está en la zona más seca. De todos modos, se colocaron alfombras que lo preservan de salpicaduras.
* Las toallas hammam ahorran espacio: mucho más delgadas que las tradicionales, su tela es súper absorbente.
* Acá se colocaron las canillas de los lavatorios un poco más arriba que lo habitual, ya que a los dueños les pareció ideal para lavarse la cara y cepillarse los dientes.
LA NACION