- 3 minutos de lectura'
La reforma de un antiguo taller textil que pasó a vivienda familiar logró recuperar frescura con nuevos frentes vidriados y una afortunada convivencia de objetos del pasado.
En María, la dueña de esta casa y de la marca de telares artesanales maria.a, subyace una vocación inquebrantable por revisar el pasado, por recuperar todo aquello que dejó una huella. Será el camino que trazaron sus estudios en psicología, que finalmente no se volcaron en un diván sino en su pasión por los muebles de época encontrados en remates y mercados. O en su oficio como creadora de textiles, que confecciona con técnicas antiguas de telar a mano.
María contrató al Estudio Mutar-conformado por Luciana Casoy, Lucila Ottolenghi y Natalia Kahanoff- para transformar en hogar lo que desde 2002 había sido su taller. La edificación de comienzos de siglo XX se había ido transformando a lo largo del tiempo, pero aun así dejaba entrever muchos de los componentes originales que la habían cautivado desde un primer momento y que ella deseaba conservar. Cinco meses bastaron para que, en un proceso de diseño conjunto con el Estudio, se lograran coser 150m2 de volúmenes aislados y refrescarlos con grandes vitrales.
Una cocina que recibe
Las ventanas y puertas de vidrio repartido pertenecían a la casa anterior de los dueños. Hicimos un trabajo de restauración minucioso para que coincidieran en los vanos que abrimos
La barra de la cocina solía ser el mostrador del antiguo taller de María y fue restaurado para protagonizar este espacio. "Sobre la tapa envolvíamos los textiles y objetos para regalo", recuerda.
Corazón de terraza (aggiornado)
Además de ser un espacio verde, la terraza del primer piso conecta el estar y el comedor con los dormitorios. Un camino de madera pintada de blanco guía el paso entre ambos sectores.
Para acentuar la conexión con el afuera, se hizo una galería semicubierta con techo de policarbonato sobre columnas de hierro tubulares. En la estructura existente, abrieron los frentes macizos con ventanales de vidrio repartido para darle claridad al sector social. El living-comedor tiene el lujo de luz, vista y óptima ventilación, gracias al patio que lo rodea por un lado y al balcón que lo hace por el otro. Sin duda, tiene todos los elementos para convertirse en el ambiente más convocante de la casa, y más cuando se encienda la salamandra, con los primeros fríos.
El balcón-terraza, que da a la vereda, también se protegió con un techo de policarbonato: todo lugar en contacto con el verde es un lugar de uso en esta casa.
El living marca el sector más colorido de este gran ambiente dominado por el blanco y el marrón. Los espejos XL eran del salón de ventas a la calle de maria.a, antes de tener el showroom de hoy.
El estilo de la casa refleja mi manera de ser y de moverme. Me apasiona ir a los mercados, meterme en lugares donde poca gente llega y sumergirme en ese mundo mágico en busca de objetos y muebles
Las persianas blancas, que María encontró en una demolición en Navarro, se adaptaron como puertas para el toilette y una pequeña cocina auxiliar, siempre a la mano por si es necesario mantener las fuentes calientes.
Dormitorios guiados por la inspiración
La alfombra forma parte de un nuevo proyecto de decoración, marroquinería, telar y calzado de María. "Mi relación con el telar comenzó investigando, en mis viajes al norte de nuestro país y a otras partes del mundo".
"El respaldo de cama es un biombo que recogí de la calle, como muchas cosas que hoy forman parte de la ambientación".
"Mi casa era mi local, mi segundo hogar. Acá pasaba muchas horas diseñando con un equipo maravilloso de gente. Mi hija más grande era bebé y se crió entre telas y tijeras".
En el escritorio que ubicó en su cuarto, María diseña las telas que luego le envía a Esteban, su tejedor y amigo. "Hace 20 años que trabajamos juntos. Compartimos la misma pasión por el telar y lo artesanal".
Esta habitación de tres niveles es compartida por dos hermanas. Para que cada una tenga su propio espacio, se realizó un entrepiso de madera que funciona como plataforma de encuentro. Desde ahí continúa el ascenso por una escalera vertical hacia el cuarto de la mayor, creado de cero con steel frame y revestido en el exterior con chapa trapezoidal gris grafito.
En el baño respetaron la división original: en la primera parte, colocaron un lavamanos que los dueños traían de su casa anterior; en la segunda, una bañadera de loza que compraron en un mercado de antigüedades.
Más notas de Antes y Después
Más leídas de Lifestyle
Revolucionario. Buscaba tener dinero y descubrió una fórmula que cambió al mundo para siempre
Superalimento. La semilla que regula el azúcar en sangre, reduce el estrés y ayuda a dormir mejor
No falla. El método para eliminar las chinches con ingredientes naturales
A tener en cuenta. El valor normal de colesterol después de los 60 años