Año Nuevo: por qué nos vestimos de blanco
La costumbre extendida tiene su origen en lo simbólico de la tonalidad y geográficamente en Brasil, donde se lo asocia con las religiones de origen africano
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Es muy común que al momento del brindis a la medianoche del 1° de enero, en la mesa siempre haya uno, varios o todos los asistentes vestidos de blanco para recibir el Año Nuevo, un ritual de la fecha que tiene un significado propio más allá de la moda.
Aunque para muchos se haya vuelto justamente una tendencia, o una costumbre familiar, y no todos elijan este color, la clave original del uso del blanco está en la simbología de esta tonalidad: en Occidente representa tradicionalmente la pureza, la limpieza, la claridad y la paz, entre otros significados nobles.
Hay que pensar en qué otras condiciones se utiliza el blanco en nuestra sociedad: en los vestidos de boda, las banderas de paz que usan los soldados al entregarse y deponer la lucha, así como la paloma blanca de la simbología católica que representa al Espíritu Santo, máximo parangón de la pureza dentro de esa fe.
Es por esto que en Año Nuevo se utiliza el blanco: para simbolizar la limpieza de lo pasado y una energía renovada de cara al nuevo período, al que se ingresa “puro” en el cambio de año al utilizar una prenda de este tono. Pero, además, existe una justificación religiosa, aunque no asociada al catolicismo, que tiene su origen en Brasil.
Muchos señalan el punto de origen de esta tradición en la fiesta de Reveillon que todos los 1° de enero se celebra en Río de Janeiro. Allí, donde los festejos por el Año Nuevo están entre los más intensos del mundo, cientos de miles de personas se meten al mar vestidos de blanco, una tonalidad que también es muy común en la ciudad brasilera de Bahía, donde su uso, así como el ritual de entrar al océano al comienzo de un nuevo ciclo, se asocian con los tributos a Lemanjá, divinidad umbanda asociada al mar que llegó al país vecino, y también a la Argentina, a través de las costumbres de los esclavos africanos traídos por los colonos europeos.
Cuál es el mejor color de ropa interior para usar en Año Nuevo
Así como muchos piensan la ropa con la que los otros los verán recibir el año, también existe un apartado para la ropa interior, cuyo color puede simbolizar los deseos secretos de cada persona para el nuevo ciclo.
- Verde: la tradición sostiene que este tono atrae la libertad, bienestar y naturaleza. También se cree que este color en particular llama a la buena suerte, aplicable a diversos aspectos y que se vincula a los buenos augurios.
- Rojo: amor y pasión: desde cientos de años se dice que el rojo atrae la pasión, así que tal vez llevar una prenda de ese color sea el ritual perfecto para los que están pensando en nuevas conquistas, buscar vínculos cercanos o compartir la vida con una persona.
- Amarillo: este color significa dinero y riqueza; ideal para los que quieran conseguir el trabajo de sus sueños o un ascenso en el mismo.
- Rosado: este tono más dulce y armonioso que el rojo es ideal para manifestar es una relación más cercana con tus amigos y personas que más quieres.
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