Los cubresuelos o tapices vegetales son aquellas especies que cumplen la función de cubrir superficies horizontales o en pendientes, sumando variedad y heterogeneidad al jardín. Suelen crecer más hacia lo ancho que hacia a lo alto, en algunos casos gracias al desarrollo lateral mediante estolones; en otros casos, son trepadoras adaptadas a este fin. Por lo general, crecen de forma muy compacta y una de sus funciones más valiosas es proteger el suelo de la desecación y pérdida por erosión: como sus raíces son fibrosas y densas, se fijan muy fuertemente al perfil, por lo que cumplen una tarea biológica importante. Además, evitan la aparición de malezas, favoreciendo así la conservación de los recursos.
Estas especies sirven para cubrir terraplenes, superficies irregulares, disimulando las rugosidades del terreno; se usan también para aquellas zonas del jardín donde apenas crece vegetación porque no reciben suficiente luz solar o están cubiertas por la sombra de los árboles, y son una alternativa para el césped en aquellos lugares donde es difícil que se desarrolle, lo que mejora el aspecto general del espacio. En los viveros, hay numerosas especies que cumplen esta función, adaptadas a diferentes condiciones de luz y de suelo, ornamentales por su follaje o su floración. Algunas ya son tradicionales en los jardines y otras vale la pena probarlas.
Para sombra y media sombra
Tradescantia zebrina
Tiene tallos decumbentes o rastreros, enraizando en los nudos. Las hojas son oblongas, agudas, verdes con franjas plateadas en el haz, generalmente púrpuras en el envés. Presenta inflorescencias solitarias, terminales u opuestas a las hojas, de color rosado violáceo. Prefiere la media sombra.
Otras especies: T. fluminensis, nativa, suele ser invasora. Tiene hojas verdes brillantes y flores blancas en primavera-verano. No tolera las bajas temperaturas. T. ‘Quadricolor’, cultivar de hojas algo suculentas, con el haz en tonos verde, rosa y blanco, y de color rosado liláceo en el envés.
T. ‘Blushing Bride’, cultivar en que las hojas nacen blancas con tintes rosados, abrazadas a los tallitos, y se tornan de color verde oscuro al madurar. Necesitan buena humedad.
Chlorophytum laxum
Cercano al popularmente conocido lazo de amor (Chlorophytum comosum), es una planta muy efectiva como cubresuelos, que también se usa en jardines verticales por su crecimiento achaparrado, de no más de 30 cm de altura, y con un crecimiento denso que forma una mata compacta. El cultivar comercializado en viveros es el ‘Bichetii’, de hojas acintadas verde claro con los márgenes blanco marfil, que no supera los 20 cm de altura. Tiene flores blancas en forma de estrella y produce los famosos hijuelos de los lazos de amor que permiten su multiplicación. Prefiere media sombra o luz filtrada, y hay que evitar el sol directo. Necesita riego regular, y es sensible a la falta de agua en veranos calurosos y secos. Admite suelos variados.
Liriope muscari
Es una herbácea perenne de raíces tuberosas, con follaje de hojas verde oscuro que crecen desde una mata de alrededor de 30 a 35 cm de altura. Sobre el final del verano, asoman sobre la planta varas erectas que portan espigas de flores azul profundo, las que dan lugar a bayas negruzcas que pueden persistir en el invierno. Prefiere suelos húmedos y fértiles a la sombra parcial; admite sombra plena pero la floración será menos intensa. Excelente como cubresuelos debajo de árboles, el cv. ‘Variegata’ brinda además la luminosidad de su follaje: hojas acintadas con una franja amarillo cremoso en el centro. Admite sol matinal.
Ophiopogon japonicus
El pasto inglés es de crecimiento cespitoso, útil para áreas de sombra plena. Crece en forma de mata, con follaje de hojas finas, de color verde negruzco, y raramente florece. Requiere climas frescos, suelos livianos bien drenados y es tolerante a la sequía. Sirve como cubresuelos debajo de la copa frondosa de los árboles. Se multiplica por división de mata.
Otras especies: O. jaburan, no tan difundido, forma matas similares al anterior pero de mayor altura, con espigas de flores blancas en verano. Existe también una variedad ‘Minor’, de menor tamaño.
Salvia procurrens
Es una herbácea nativa de no más de 30 cm de alto, muy vigorosa, con tallos rastreros radicantes en cada nudo que le permiten colonizar más allá del área donde se la ubica, lo que la vuelve muy invasora. Tiene hojas cordadas, verde intenso, y en la primavera asoman sobre la planta espigas de flores azuladas con el centro blanco, muy pequeñas.
Es un excelente cubresuelos de sombra, aunque admite pleno sol. Requiere riego regular, suelos livianos y es muy fácil de propagar por esquejes de tallo. Habita naturalmente en Buenos Aires y Entre Ríos.
Vinca major
Es una herbácea de hábito rastrero y porte extendido, con tallos de unos 20 a 60 cm de largo, con raíces en los nudos y con látex al corte. Posee hojas pequeñas, lisas, verde oscuro, de forma elíptico-lanceolada, brillantes, opuestas y enteras. Las flores son de color celeste azulado, con cinco pétalos, y aparecen desde mediados de la primavera hasta principios del verano. Se propagan fácilmente por esquejes de tallo. Hay una forma botánica, la f. alba, de flores blancas; el cv ‘Argenteo Variegata’ posee hojas marginadas de color blanco cremoso.
Otras especies: La V. major tiene hojas de forma oval, opuestas, enteras y brillantes, acorazonadas en su base, de márgenes pilosos. Las flores son similares a la anterior. La Vinca major var. variegata tiene hojas marginadas en blanco crema.
Viola odorata
Es una herbácea perenne, rizomatosa, que crece a partir de una roseta de 15 cm de altura y que se extiende por estolones. Tiene hojas acorazonadas, verde oscuro. Desde finales del invierno hasta principios de la primavera muestra sus flores aplanadas, de color blanco, rosado o violeta, con una mancha basal blanca en el centro, muy perfumadas. De todos los aromas y esencias vegetales, ninguno se compara a la fragancia de la violeta dulce. Prefiere sitios húmedos, bajo la copa de árboles de hoja caduca, ya que agradece la sombra en verano, pero necesita sol en el invierno y la primavera. Hay que cuidarla de las hormigas. Se multiplica por división y a partir de semillas. Se comercializan numerosos cultivares con diferentes tonos de flor e intensidad de perfume.
Lamium maculatum
Forma una mata densa de tallos con cuatro ángulos y hojas acorazonadas de borde aserrado, que desarrollan manchas blancas características cuando hace frío. Sobre la mata surgen espigas con flores violáceas de garganta blanca. Requiere suelos livianos, orgánicos, húmedos pero bien drenados. No tolera la sequía, ya que pierde sus hojas rápidamente. Se comercializan varios cultivares: ‘Beacon Silver’, de follaje casi gris plata; ‘Aureum’, de follaje amarillo limón, y ‘Red Nancy’, de follaje gris plata y con flores púrpura. Iluminan mayormente rincones sombríos. Son ideales para cubrir la base de árboles frondosos.
Otras especies: Lamium galeobdolon subsp. Argentatum, de 15 a 50 cm de altura, con verde claro con una mácula plateada en forma de V en el centro. Sobre la mata de la planta sobresalen en la primavera espigas con flores amarillas con manchitas marrones. No debe faltarle agua en el verano.
Plectranthus verticillatus
Tiene hojas verde brillante. Requiere suelos francos y húmedos, y temperaturas medias. Tiene baja tolerancia a la sequía. Es fácil de propagar por esqueje de tallo. Lo ideal es plantarlo bajo la copa de árboles frondosos.
Otras especies: P. ciliatus o dólar negro, de hojas verde oscuro con el envés violáceo, y P. argentatus, de follaje gris plata. El P. madagascariensis o falso incienso, con hojas variegadas y muy aromática, requiere ubicación en sombra parcial.
Para Sol
Ajuga reptans
Es una herbácea que se extiende mediante estolones, de no más de 20 cm de altura. Tiene hojas ovaladas, dentadas o ligeramente lobuladas, de color verde oscuro. En la primavera produce flores azules en una espiga erecta. Existen variedades con distinto color de follaje: ‘Bronce Beat’, de un fuerte tono bronceado; ‘Rabino’ (vendida también como ‘Multicolor’), de tonos crema, rosa y púrpura sobre el verde; ‘Golde Beat Bugleweed’, variegada en verde claro y crema, y ‘Golden Glow’, variegada en amarillo, entre otras. Requiere riego frecuente. Necesita media sombra o sol matinal. Hay que cuidarla de las hormigas.
Tradescantia pallida
Conocida también como Setcreasea purpurea. Se cultiva la variedad ‘Purpurea’ (‘Purple Heart’), que forma una mata densa de tallos y hojas suculentas, de un tono violáceo impactante, con flores rosadas en la estación cálida. Aporta un contraste interesante con follajes grises o verde claro. Es resistente y se adapta bien a diferentes situaciones de clima (salvo los muy fríos), ambiente y suelo. Necesita mucha luz y no responde bien en lugares sombríos (no adquiere el color típico y la mata es más floja). En el verano requiere riego frecuente, pero este debe reducirse durante el invierno. Es fácil de propagar a partir de esquejes. Hay que plantarla a pleno sol.
Persicaria capitata
Conocida también como Polygonum capitatum. Forma un tapiz denso, de no más de 20 cm de altura, con hojas pilosas, verdes con una mancha en forma de V rosada purpúrea en el haz, sobre tallitos rojizos. Produce inflorescencias en cabezuelas pequeñas de flores rosadas. Prefiere el sol, donde expresa mejor su color, pero puede ubicarse a media sombra. Necesita riego frecuente y no tolera bajas temperaturas. Es fácil de reproducir por esquejes. Cubre rápidamente el área donde se instala. Hay que cuidarla de las hormigas.
Stachys byzantina
Es un magnífico tapizante no solo por las características de su follaje y floración, sino también por las condiciones de cultivo: admite pleno sol y es tolerante a la sequía. No es recomendable plantarla en suelos arcillosos de mal drenaje. Tiene hojas verde plateado, aterciopeladas, de aspecto suculento, y flores de color morado que asoman sobre la planta a fines de la primavera. Alcanza alrededor de 20 cm de altura, y algo más cuando está en flor. Es ideal para xerojardinería.
Mesembryanthemum cordifolium
Conocida anteriormente como Aptenia cordifolia, es una herbácea rastrera, de rápido crecimiento, que no supera los 10 cm de altura, muy densa y compacta. Tiene hojas acorazonadas, carnosas (comestibles), verde brillante. Sus flores, similares a margaritas, cubren toda la planta durante el verano; son de un tono rosado rojizo y muy vistosas. Existe un cultivar de follaje variegado. Hay que ubicarla a pleno sol, en terrenos bien drenados. No tolera las heladas. Requiere poco riego. Se multiplica fácilmente a partir de esquejes.
Erigeron karvinskianus
Es una herbácea vigorosa que forma matas redondeadas de unos 30 cm de alto, con tallos muy ramificados. Tiene hojas estrechas, lanceoladas, de color verde grisáceo. Durante el verano produce inflorescencias similares a pequeñas margaritas, que al abrir son blancas y al madurar se tornan de color rosado claro, lo que le da al conjunto un efecto inusual de dos tonos. Precisa pleno sol o sombra parcial y suelos bien drenados. Resiste sequías una vez establecida y tolera condiciones costeras.
Rosmarinus officinalis var. prostratus
Es un arbusto bajo de crecimiento achaparrado y compacto, de alrededor de 35 cm de alto y más de 1 m de diámetro. Tiene hojas aromáticas, angostas, lineares, con el haz verde oscuro y el envés densamente blanquecino y tomentoso. La inflorescencia se presenta en racimos, con flores bilabiadas celestes, a veces blanquecinas. Requiere pleno sol. Tolera suelos secos y calcáreos, aunque necesita riegos frecuentes en el verano.
Origanum vulgare
Es una herbácea perenne, de hábito postrado, muy ramificada, que puede alcanzar de 35 a 40 cm de alto y 1 m de diámetro. Tiene tallos de sección cuadrangular, con hojas muy aromáticas, pequeñas e hirsutas, de color verde oscuro. Florece en verano, con flores blanco rosadas muy pequeñas que aparecen en espiguillas terminales o axiales. Prospera en suelos livianos, poco desarrollados, pedregosos, con muy buen drenaje a pleno sol. No tolera el encharcamiento. Es resistente a plagas y enfermedades, y muy útil contra la erosión del suelo. Se comercializan variedades con hojas variegadas, doradas, que admiten su cultivo también en contenedores.
Thymus serpyllum
Conocido como tomillo o serpol, tiene tallos prostrados, más o menos leñosos en la base y muy ramificados, y hojas planas. Las flores son labiadas, de color rosado fuerte, y se disponen en glomérulos en el ápice de los tallos principales o de tallos laterales erectos. Requiere suelos livianos, bien drenados. Necesita sol pleno y escasa humedad. Resiste el fío, mucho más que el tomillo común (Thymus vulgaris).
Texto: Ing. Agr. Gabriela Benito
LA NACION