Alertan a los turistas sobre qué hacer (y qué no) si encuentran un delfín bebé
El delfín franciscana o delfín del plata es considerado el cetáceo más amenazado del océano Atlántico en América del Sur y llama la atención la cantidad de veces que ejemplares "bebés" de estos animales aparecen varados en la costa Argentina. Incluso, en el último mes y medio fueron rescatados tres animales de esta especie en las localidades balnearias de Atlantis, Las Toninas y Cariló.
Los animales fueron asistidos por la fundación Mundo Marino tras el llamado de los vecinos, pero de los tres, solo el cetáceo hallado en Cariló sobrevivió. Ante esto, las alarmas se encendieron, debido a las pocas probabilidades de supervivencia que tienen estos animales una vez que quedan varados.
"En el caso de estos últimos tres rescates de franciscanas vivas, estuvimos enviando información en tiempo real a especialistas internacionales que, con la Fundación, conforman un grupo de trabajo que está desarrollando un protocolo para la rehabilitación de delfines recién nacidos o cachorros", explicó Andrea Cabrera, vicepresidenta de la Fundación.
Según los especialistas, el hecho de que la mayoría de los animales encontrados varados vivos sean cachorros recién nacidos hace que su tasa de supervivencia sea bajísima. Ningún centro de rescate en la región pudo mantener un recién nacido de la especie vivo durante más que un par de semanas.
"La hipótesis más aceptada de la aparición de cachorros varados tiene que ver con la posibilidad de que las madres de estos cetáceos lactantes mueran en redes de pesca, lo que obliga a la separación física de ambos. El cachorro comienza con un desplazamiento errático y termina varado en la playa", explicó Pablo Denuncio, doctor en ciencias biológicas e investigador de la Universidad Nacional de Mar del Plata y del CONICET.
"En la mayoría de los casos son animales muy pequeños y no superan los 10 días de vida y estos cachorros necesitan estar de 7 a 9 meses lactando. Si bien la aparición de estos cachorros indica que la especie se está reproduciendo, especialmente en el área del Cabo San Antonio, la circunstancia en la que aparecen no es alentadora", agregó denuncio.
Qué hacer ante el hallazgo de un cachorro de franciscana
Las recomendaciones de la Fundación Mundo Marino en el caso de que una persona se encuentre en la playa con uno de estos ejemplares varados es la de comunicarse de manera urgente con personal idóneo.
Mientras tanto, se debe mantener al animal con poca agua, con el espiráculo (el agujero por el que respiran, que está ubicado en su cabeza) fuera del agua. En esos casos, no se debe intentar reingresar al animal al mar, porque en caso de haber quedado varado está débil y al volver al medio líquido puede entrarle agua en los pulmones, lo que agravaría más su situación.
También es importante alejar a la gente de alrededor del cetáceo, para que no se estrese, y solo deben trabajar una o dos personas para mantenerlo húmedo. Para saber si el animal se encuentra vivo, aún estando inmóvil, es necesario observar que el espiráculo no se encuentre cerrado ya que es a través de él que el animal realiza el intercambio de gases con los pulmones.
Si el delfín se encuentra muerto, en tanto, es mejor no tocarlo ni acercarse, para evitar cualquier riesgo sanitario que pueda implicar manipular el cadáver.
Siempre que el animal esté vivo es necesario alejar a la gente para que no se estrese, y con la asistencia de 1 ó 2 personas debe mantenérselo húmedo. Para discernir si el animal se encuentra vivo hay que observar que el espiráculo no se mantenga cerrado, ya que es a través de ese orificio por donde realiza el intercambio de gases con los pulmones.
En caso de encontrarse muerto, no acercarse por el riesgo sanitario que puede implicar.
Ante la situación de encontrarse con un cachorro de delfín franciscana en la playa, se recomienda hacer un llamado al Centro de Rescate de la Fundación Mundo Marino, cuyo número ante urgencias es (02252) 43-0300, o llamar directamente a la Prefectura Naval Argentina, al número 106.
Sobre el delfín franciscana
La franciscana es un cetáceo que solo habita en las costas del sur de Brasil, Uruguay y Argentina hasta el norte de la provincia de Chubut. Se lo considera el cetáceo más amenazado de la costa atlántica de América del Sur y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) considera como "vulnerable" su estado de conservación.
Lamentablemente uno de estos ejemplares fue noticia en febrero de 2016 cuando unos turistas lo encontraron en la playa y lo levantaron para sacarse selfies y ocasionaron su muerte. Lo mismo sucedió un año después, en enero de 2017, pero en las playas de San Bernardo.
Su vulnerabilidad se debe a que es un cetáceo de comportamiento costero que elige aguas de no más de 30 a 35 metros de profundidad y suelen vivir a una distancia muy cercana a la costa, casi detrás de la rompiente de olas.
Esta característica hace que sea una especie amenazada tanto por la pesca incidental y el tráfico marítimo como por la contaminación química y acústica. Solo en la provincia de Buenos Aires se calcula que mueren anualmente entre 500 a 800 ejemplares por quedar atrapados en redes de pesca.
Esta especie es residente de la costa de la provincia de Buenos Aires por lo que puede ser vista a lo largo de todo el año. Su nombre vulgar "franciscana" se inspira en el color pardo amarillento de la vestimenta de los sacerdotes franciscanos.
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