Aunque ya es posible tener en formato digital toda la música y los libros que podremos disfrutar de aquí a la eternidad, la biblioteca sigue siendo uno de los espacios más valorados de un hogar.
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Geométricas, con estantes regulables, clásicas o en colores que iluminan los ambientes, representan todo un desafío al decidir cómo será el mueble en el que pondremos en exhibición permanente aquellas lecturas, discos, obras de arte o piezas atesoradas que dejan huella material y espiritual en nuestras vidas. A continuación, ideas para darle el lugar de privilegio que siempre merece.
Con peso propio
Intuitiva, ecléctica, casi barroca. Así es la biblioteca de diseño geométrico de la decoradora y restauradora Patricia López , creadora de la firma de deco Los Cuatro Vientos que impacta por su potencia visual. Además de los libros, ella no dudó en colgar obras de arte de los estantes para sumarle aún más capas de interés. De esa superposición de sensaciones surge la armonía.
Sigue la línea
En un departamento clásico y señorial, remodelado por el arquitecto Gustavo Saibene, esta biblioteca realizada en madera de cerejeira sigue la curvatura de la pared. El espacio, con una vista increíble, se completa con un sofá beige y mesa de madera (Gris Dimensión) y sillones antiguos retapizados. Lámpara colgante de Weplight en gajos de madera, lámpara Tolomeo (todo de iluminación Agüero).
Solución en pocos metros
La biblioteca, inspirada en un diseño del arquitecto sueco Nils Strinning y realizada por Calyfornio en hierro negro y petiribí, es la estrella de este departamento. Se pueden agregar estantes, modificar las alturas y hasta colgar objetos de los paneles separadores. En este modelo, se incorporaron cajones, puertas para aumentar el espacio de guardado y una tabla de doble profundidad que funciona como escritorio.
"El interés por las bibliotecas se mantiene porque, de alguna manera, son como cartas credenciales que dan cuenta de gustos, saberes y consumos culturales"
Martín Liberatore, del grupo de diseño Calyfornio.
Para melómanos
Mariano quería tener su colección de discos a la vista y bien dispuestos como para mantener su ritual de cada día: llegar a casa y escuchar música. Para eso, construyeron una biblioteca en obra con estantes de placas de yeso de piso a techo (diseño Arq. Giselle Chalu).
Los estantes amurados alivianan el mueble, que se hizo para que una cantidad exacta de CD ocupara el espacio de manera simétrica.
En las alturas
Lejos de los diseños acartonados y convencionales, el entrepiso de línea circular resultó un lugar inmejorable para esta biblioteca con estantes de madera que está muy cerca del escritorio para agilizar cualquier consulta de algún libro.
Laboratorio de ideas
La cocina, siempre como espacio de encuentro, reunión y en este caso, también lectura. En este departamento barcelonés, la arquitecta Bárbara Aurell, de Espacio en Blanco Estudio, le dio un rol central a esta alacena / biblioteca en forma de L que recorre todo el perímetro del bajo mesada.
Premisas para pensar el diseño: que no invada el espacio y se mimetice con el ambiente. En lugares amplios, pueden ser de materiales robustos. En espacios reducidos, deben ser livianas y compactas.
Diseño compacto
Hecha a medida, esta biblioteca de madera tiene prolijos compartimentos para guardar de todo y, arriba, espacios más amplios. El color blanco, la hace más liviana y compensa el espacio reducido.
Modular, y con firma
“Lo que más valoro son mis discos y mis libros y discos”, dice el arquitecto Craig Steely desde su vanguardista casa / estudio de San Francisco. Para objetos tan amados, eligió un modelo que es todo un símbolo: el famoso sistema universal de estanterías 606, pensado por Dieter Rams para Vitsœ. Los estantes son funcionales, movibles y, sobre todo, siempre su diseño siempre será actual.
Estructura interactiva
La biblioteca que acompaña la doble altura suaviza el estilo industrial que dan los muebles y la carpintería metálica en negro en este PH reformado por el estudio Además Arquitectura. Así, en un mismo ambiente se crean distintos escenarios. Este, es el que guarda la información y los gustos personales de la dueña de casa.
Pura nobleza
La madera es parte de la esencia de la casa de los arquitectos Teresa Sarmiento y Nicolás Tovo (también socio de la marca de diseño de muebles Net). La estantería de madera reciclada, que ocupa toda la pared, es protagonista absoluta del living. Los estantes, regulables e irregulares dejan espacios en blanco que jerarquizan cada objeto exhibido.
Al tono
Para darle nueva vida a este departamento de 1890, la fotógrafa Verónica Ruiz buscó muebles que respetaran la escala de la planta y el estilo de los pocos, pero valiosos elementos originales que quedaban. Así, rescato el modelo de esta biblioteca de una revista de los años 70 que encontró en la casa de su mamá. Hecha a medida y con compartimentos iguales, quedó perfecta sobre el fondo pintado en color ‘Marrón Profundo’ (Alba).
Palabras mayores
“Lo funcional es, finalmente, lo que da el marco para tener una buena vida”, sentencia con toda autoridad, la diseñadora danesa Bárbara Bendix Becker. Su biblioteca, sigue la tendencia de ordenar algunos libros por color, una categoría sin dudas, estética. También ocupan un lugar destacado las piezas de porcelana rosa que recibió como herencia de su padre anticuario. Arriba, una serie de vasijas que hizo con su socia Mette Bache en el estudio r7b.dk. ¿Qué es lo que más le gusta a ella de este genuino espacio escandinavo con sillas ‘Oxford’ de cuero? Por supuesto la impactante escalera, obra de Cecil Manz, con uno de los peldaños cóncavos para usar como asiento.
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