En su mansión. Heredó una fortuna y la usó para crear un excéntrico museo que une a Maradona con la princesa Diana
Marilyn Monroe, Diana de Gales y Diego Maradona convivieron en Chile en un mismo espacio. O por lo menos lo hicieron a través de sus piezas más representativas, en las diferentes exhibiciones temporarias que propone el Museo de la Moda, en la ciudad de Santiago. Son más de 15.000 piezas que atesora la institución, entre objetos de arte griego y romano, como también vestimenta y accesorios. En este caso, datan del SXVIII hasta nuestros días.
El fenómeno de conservar y exhibir la moda en los museos está integrada a la vida cultural de nuestros tiempos. Ya no sorprende que la vestimenta sea enaltecida, para convivir con la pintura y la escultura y. en otros casos, ser la total protagonista en los templos de la cultura. Y si bien se han generado algunas controversias en relación a la presencia de la moda en el ámbito museológico, lo cierto es que la tendencia va en aumento, a nivel mundial.
“No se trata solamente de una exhibición, es también un evento cultural. Las ciudades se dieron cuenta de que el tema atrapa a diferentes generaciones”, comparte Pamela Goldin, una de las curadoras del Museo de la Moda y Textil, de Louvre Paris.
Mientras que, en las grandes ciudades, como en Nueva York, el Metropolitan Museum of Art (MET) le dedica una importante exhibición anual, que suele ser inaugurada con una gala liderada por Anna Wintour, editora de la revista Vogue. En Londres, el Victoria & Albert Museum (V&A), meca de las artes decorativas, puede llegar a ofrecer hasta dos muestras fashion en una misma temporada.
Existen otras instituciones más pequeñas, pero no menos atractivas para el público joven, como el Museo del Fashion Institute of Technology de Manhattan (FIT), que cuenta con una colección propia de más de 100.000 piezas entre indumentaria y accesorios, y cuyo team curatorial es liderado por la respetada Valerie Steele.
En América latina, desde 1999 se destaca el Museo de la Moda, por su nivel internacional y también por su director y fundador, Jorge Yarur Bascuñan, que es el responsable de su contenido y temáticas. y el único heredero del magnate algodonero de origen palestino, Jorge Yarur Banna.
Su padre fue un hacedor y exitoso empresario textil que también estuvo al mando del Banco de Crédito e Inversiones hasta sus últimos días. La familia Yarur en Chile es una de las más importantes en términos de patrimonio, y conserva una de las colecciones de arte más destacadas de ese país.
Lo que diferencia al Museo de la Moda es que no solo conserva una importante colección de vestidos femeninos, sacos y chaquetas masculinas del SVIII, sino que cuenta con la colección privada más grande a nivel mundial de vestidos de la princesa Diana de Gales.
En la muestra Recordando a Diana fue exhibida una selección de 10 vestidos en color blanco y negro junto a imágenes fotográficas de las diferentes etapas de la vida de Lady Di. Además, se confeccionó una reproducción del vestido de novia original.
Para esa muestra, Jorge Yarur adquirió personalmente algunos en Londres, y otros fueron recibidos en calidad de préstamo, por el Museo de Kensington. Lo mismo sucedió para la exhibición Marilyn Monroe, cuando el director viajo especialmente a Los Angeles para hacerse de vestidos de la diva.
Vistiendo el Tiempo fue la primera exhibición del museo, que tuvo como propósito evidenciar la evolución cultural e histórica de la sociedad, en un recorrido retrospectivo desde el SXVII hasta el presente.
Otra muestra destacada fue la de la década de los 80. Justamente, bajo ese vasto universo de estilos, diseñadores y personalidades, el Museo está desarrollando un proyecto editorial, un libro que será publicado por la Editorial Rizzoli.
La historia de la moda se amalgama con los artistas musicales, y Amy Winehouse también tuvo su tributo con una exhibición virtual durante el 2020 y 2021, debido a la pandemia. Para desarrollarla, el museo logró que los padres de la artista británica cedieran aproximadamente 65 piezas entre vestuario y objetos utilizados en sus diferentes shows. Fue la primera de las tres muestras que se realizaron consecutivamente en otras ciudades, como Londres y Los Angeles. Todo un logro para un museo sudamericano.
Una de las últimas exhibiciones rindió tributo a Diego Maradona, que se inauguró el 11 de diciembre de 2020, con un tour cronológico por la vida del jugador. Incluía camisetas de Argentina Junior, Boca, Napoli y de los Mundiales que jugó el astro del fútbol argentino. El museo conserva una de las colecciones privadas más importantes del legado Maradona.
Para fines de este año, el museo promete desarrollar la muestra Erotismo y su influencia en el vestuario, y a la vez editar un libro complementario junto con Dita Von Teese, la actriz del burlesque.
El museo y su legado
En 1999, Jorge o Toto, como lo llaman en su tierra, decidió transformar la mansión de sus padres en un museo moderno, que conserva los espacios originales de la casa, bajo la misión principal de convertirla en una entidad cultural dinámica, con patrimonio nacional e internacional.
Las exhibiciones suelen ser temporales y son nutridas por la colección estable del museo, aunque en algunos casos suman objetos prestados de museos, como el Kensington de Londres, u otros internacionales. Con mérito propio, el Museo de la Moda pertenece a ICOM (Organización Mundial de Museos), lo que favorece el intercambio de piezas entre países.
Concentrado originalmente en las décadas del 50 y 60, y gracias a donaciones y adquisiciones de diversas fuentes, cuenta con una colección significativa de vestuario, textiles, artes decorativas, y prendas deportivas que abarcan desde el SXVIII hasta hoy.
La pasión de Yarur por la ropa vintage se remonta a su niñez. “Mamá sentía fascinación por los diseñadores porteños. La moda en Chile era muy tradicional en aquel entonces, así que ella viajaba a encargar sus vestidos a Buenos Aires, y también me compraba la ropa aquí. El mundo textil no es ajeno a mi infancia, al contrario, crecí visitando las fábricas de mi abuelo. Todavía recuerdo el ruido de las máquinas y el aroma que emanaba del teñido del algodón. Era un proceso fascinante¨, dice a LA NACION revista durante su visita a Buenos Aires.
“Este museo es un homenaje a mis padres, un lugar que preserva la tradición textil de mi familia, y su patrimonio”. Para emprender este ambicioso proyecto, contó con el asesoramiento de una curadora de moda francesa en temas inherentes a restauración y conservación del textil.
Para conocer más sobre el Museo de la Moda, su web ofrece un interesante recorrido virtual https://museodelamoda.cl