Reseña: Un cuento de Navidad, de Alejandro Zambra
Nada más placentero para el lector voyeur que se le ofrezca la posibilidad de espiar en la trastienda de los procesos creativos. Más aún si esa oportunidad no se da por azar, sino que son el propio autor y el editor quienes le abren la puerta para observar. Es lo que ofrece Un cuento de Navidad, de Alejandro Zambra (Chile, 1975), publicado por el sello mexicano Gris Tormenta en su colección Editor, que pone el foco en el vínculo entre un autor y su editor literario para reflejar “lo que sucede antes de que un libro sea abierto por un lector”.
Con prólogo y exquisitas notas al pie de Andrés Braithwaite (que Zambra no acata, pero incluye como parte del relato, ya que establecen un diálogo profesional y muestran el nivel de confianza y complicidad que existe entre ambos), Un cuento de Navidad resulta un combo perfecto. Tiene, además, un guiño ficcional centrado en la figura del editor del periódico Las últimas noticias, donde Zambra empezó su carrera como crítico cuando solo le importaba quedarse con buenos libros para su biblioteca.
El libro narra –como indica el subtítulo– “una historia sobre los vínculos entre la literatura y la vida”. Más allá de las anécdotas que revela el autor de Poeta chileno, lo más curioso es lo que escribe Braithwaite en “Desde la fatiga”: cómo hizo alguien a quien no le gusta prologar libros para cumplir con el pedido de la editorial y el “capricho” de su amigo, que solo aceptó que el volumen tuviera prefacio si lo escribía el editor. En un momento, “Zambrita” o “Zambrota”, como le dice AB, asegura que conocerlo le cambió la vida. En la nota al pie, el editor responde: “¡Qué exagerado!”.
Un cuento de Navidad
Por Alejandro Zambra
Gris Tormenta
104 páginas, 4300