Reseña: Semblanzas de mujeres medievales, de Nilda Guglielmi
En Semblanzas de mujeres medievales, Nilda Guglielmi, doctora en Historia por las universidades de Buenos Aires y de Aix-Marseille, exprofesora titular de la UBA e investigadora superior del Conicet, penetra en el apasionante y poco conocido ámbito de las mujeres medievales a través de testimonios escritos, elegidos por la especialista.
Guglielmi sostiene que no existe una “mujer medieval”, especie de molde aplicable a cuantas personas de ese género transitaron del siglo IV al XVI, sino distintos tipos de mujeres según el momento histórico, la región geográfica y las tradiciones religiosas que las condicionaron en forma inexorable.
En la primera parte, “La mujer imaginada”, la autora estudia cómo se configuró el arquetipo de “mala mujer” a partir de la literatura pagana y cristiana en textos misóginos que se ensañan con los hábitos, los fraudes acerca de la virtud en el momento de contraer matrimonio, la poca limpieza y la falta de prudencia, entre otros deméritos, para los cuales, tanto religiosos como seglares, se sentían llamados a proporcionar severos consejos.
Una vez presentada esa idealidad con prosa vívida y grata, Guglielmi estudia a la mujer real, y comienza con la que actúa en la vida cotidiana, desde los márgenes de la sociedad. Advierte que es difícil “lograr la imagen de la mujer real, saber si la mujer burguesa del período elegido, coincidía con el modelo que la sociedad había aceptado”, porque pocas veces se encuentra un yo femenino que hable “de su condición, de las circunstancias y alternativas de su vida”.
Como en el caso anterior, es más fuerte la voz de los hombres a través de sus memorias y cartas. Estos se caracterizaron por estampar una visión generalmente antifemenina y suministrar remedios para devolver la virtud a la mujer. Pero Guglielmi aprovecha, con la habilidad de quien conoce la época como pocos, las cartas de dos mujeres minuciosas: Monna Alessandra Macinghi Strozzi y Santa Caterina dei Ricci, que permiten caracterizar costumbres y oficios.
Sin duda, el centro de su reflexión está en las mujeres de la burguesía italiana de los siglos XIII al XVI y su presencia en el andamiaje social, económico y jurídico de aquellas ciudades. En páginas de singular maestría, la autora describe a las mujeres solas: solteras, solteronas, bastardas, separadas y viudas, a la par que subraya la importancia del papel femenino en las cuestiones matrimoniales, tanto en el plano festivo como en el más complejo y comprometido de lo jurídico con el fin de sostener alianzas y defender el patrimonio familiar.
Semblanzas de mujeres medievales se suma así con honor a otros aportes fundamentales de la autora como El Fisiólogo (primer bestiario medieval), Memorias medievales y Pasiones políticas en la Italia medieval.
Semblanzas de mujeres medievales
Por Nilda Guglielmi
Miño y Dávila
320 páginas, $ 5400