Reseña: Quiero estar con vos, de Flor Monfort
En los dieciséis poemas de Quiero estar con vos se cuentan en simultáneo varias historias: la de una ruptura amorosa, la historia clínica y lírica de una enfermedad y la de una tribu integrada por amigas, madres (vivas y muertas), un hijo y además ese “intruso”, el pájaro negro del tumor maligno al que a veces se sobrevive sin saber cómo. Si bien el cáncer de mama nunca se menciona de manera explícita, se lo “detecta” en una primera lectura. “Una de cada ocho lo tienen”, se lee en uno de los poemas.
En sus dos libros anteriores, Flor Monfort (Buenos Aires, 1976) seguía de cerca el hilo de encuentros y desencuentros entre padres, amantes, amigas y desconocidos. En este caso, el cuerpo asume un papel protagónico, por momentos de modo dramático (“Mi cuerpo pasó por rayos / máquinas soviéticas / latas y vidrios que en danza / reflejan la cara de bruja / temprano estilo trámite”) o con un leve acento pop: “Llegaba a la terminal del cáncer / en el barrio de moda / todos jóvenes mirándonos / un after sin palabras”. En Quiero estar con vos, sea quien sea esa segunda persona, se ensaya un canto de voz quebrada y a la vez chistosa.
Presentadas como criaturas surrealistas antes que como ejemplos de virtud y sacrificio, las figuras maternales habitan varios poemas de Monfort: “Las madres son comandantes / comediantes azafatas / sirven con rencor. / Está bien dejar de romper / por ellas, sus nervios coliflores / lo hacemos todo para que vivan más / aunque viejas y vinagres”. La misma autora encarna con hidalguía paródica uno de estos semblantes: “Madre soltera: / un status con prestigio / se lleva en cada escama / de la cuna hasta la cama”. Este desplazamiento generacional (definido como “linaje femenino vidrioso”) que impregna con ambivalencia la escritura se reproduce en el “mapa genético” planteado por el libro donde, pese a “la señalética furiosa de no avanzar”, se insiste en un tránsito de fluidos y rituales, de sueños y despedidas. De una casa con humo suave para espantar insectos a otra “que tejerá un puente con el pasado”, los poemas oraculares modulan de cara al futuro “esa noción ístmica, ondulante / ese lunar de bordes tumorales que es el yo”.
Quiero estar con vos
Por Flor Monfort
Caleta Olivia
56 páginas, $ 880