Reseña: Ahora sabemos esto, de Adriana Riva
Los noventa y ocho poemas que componen Ahora sabemos esto, de Adriana Riva (Buenos Aires, 1980), se centran en la figura de la madre de la autora y en su relación con ella. Esta temática se va desarrollando bajo la tutela de La Odisea (“…una historia/ que nos transformó/ en par…”), con citas de esta obra de Homero (“el sufrido de entrañas”), pero también de Cavafis (“Ítaca no tiene/ ya nada más que darte”) o, en referencia al Minotauro, de un cuento de Borges.
En estos versos de concisa expresividad lo legendario y lo fabuloso se trasladan al actual mundo cotidiano y se encarnan en una sencilla humanidad (“¿Habrá también Penélope/ esperado en pijama?”; “¿Le dolía la panza a Ulises?”). El amor compartido por los libros (“…Leemos después/ de almorzar fideos al dente…”) y el significado de las palabras (“dice que solo/ aprende palabras/ cuando entiende/ su origen.”) son otros elementos que forman parte de este microcosmos lírico.
Podría hablarse de la búsqueda definitoria de una madre cuya imagen puede tornarse elusiva (“Mamá tiene/ la forma/ del viento.”) o acercarse a través de una recolección de frases (“Dice ¡qué hermosura!/ Dice son unos desgraciados/ Dice ¡absolutamente!…”). Una imagen que genera frustración (“Cómo me equivoqué/ creyendo/ que la podía/ narrar…”) y sentimientos contradictorios (“pero a veces sueño/ con ofrecer a mamá/ en platos ajenos”).
Quizá “…unir/ lo disperso/ no es la respuesta.”, pero en compensación los poemas de Ahora sabemos esto dejan a su paso sutiles postales de un intenso viaje afectivo e intelectual.
Ahora sabemos esto
Por Adriana Riva
Rosa Iceberg
122 páginas, $ 1690